Galicia, un museo del arte urbano

“En Galicia hay mucha tradición de arte urbano, por suerte o por desgracia existe mucho feísmo arquitectónico y medianeras que exigen una segunda relectura de las que nos aprovechamos los artistas para transformarlas”. Así explica la muralista Lula Goce alguno de los motivos de la eclosión de arte urbano en ciudades y villas gallegas que ha puesto a nuestro territorio en el punto de mira internacional por la cantidad de actuaciones que se llevan a cabo y ha llevado a tres murales pintados en paredes gallegas a ser elegidos como los mejores del mundo en 2023 por votación popular en el concurso Street Art Cities: uno en Fene, el segundo en Nigrán y el tercero en Lugo.

Trío de reinas: los mejores murales del mundo están en Galicia

El retrato de una mujer con un violonchelo que cobra vida por las noches en un edificio de nueve plantas de Fene se convirtió en el mejor del año 2023 en el concurso organizado a nivel internacional por la plataforma Art Street Cities, muy conocida en Galicia desde que Diego As ganó el certamen por su mural de Julio César en las inmediaciones de la muralla de Lugo. La obra, firmada por el madrileño SFHIR, es una de las tres realizadas el pasado mes de agosto en uno de los festivales de arte urbano más noveles de Galicia, el Perla Mural Fest, certamen promovido para recordar una famosa sala de fiestas de la villa a iniciativa de un particular, Ramón Pereira, al que ayudó su yerno, Fran Lage, organizador también del festival Fene Rock.

Con poco presupuesto, reunido entre las aportaciones de comerciantes y una colaboración del Concello, el certamen contó con la participación de tres muralistas –. SFHIR, el lucense Rubén Paz -Trece Trazos y la sevillana Virginia Bersabé – . “Al principio dudábamos de la acogida que iba a tener en el pueblo, pero tanto los jóvenes como la gente mayor se implicaron con los murales y, luego, en las votaciones de la web de Art Stret Cities”, comenta Fran Lage, quien valora el impacto que ha tenido ese galardón, que ha convertido al mural ganador en reclamo turístico para el municipio. La singularidad del edificio en el que luce, cuya estructura en tres partes permitió al artista aprovechar el hueco de la escalera para colocar el violonchelo, y la fortuna de comprobar cuando lo estaba confeccionando de noche cómo las cuerdas del instrumento se iluminaban cuando un vecino encendió la luz hicieron que esta obra fuera la favorita de los tres primeros murales de gran formato que existen en Fene y , luego, de las votaciones en la mencionada plataforma de arte urbano.

“A dona do estuario”, hiperrealismo combinado con poesía, es el mural de Lula Goce en Nigrán que mereció el segundo premio del Art Street Cities. La artista baionesa cuyas obras urbanas decoran ciudades desde Vigo a Nueva York, pasando por otras localidades españolas, de Bélgica, Alemania e Italia, se muestra especialmente satisfecha con la acogida del público al mural hecho en su territorio y aunque reconoce que el valor de ese galardón es “relativo”, pues depende en gran medida de las campañas de promoción que hagan los promotores del proyecto, en este caso el Concello de Nigrán, se siente orgullosa de poder aportar algo al pueblo donde tiene su taller y de la repercusión de visitas que está teniendo. Para esta composición se inspiró en un retrato de Penélope Cruz del que le gustaba la pose, acudió a la Inteligencia Artificial para que le ofreciera una imagen hecha a partir de muchos conceptos de mujeres, la transformó y se la dedicó a su madre, que en esos momentos estaba ingresada en la UCI tras un grave accidente. “Fue muy emotivo el hecho de firmar en casa, hacer el boceto sentada en el hospital al lado de la cama de mi madre y que todo el mundo viniera a ver cómo hacía el mural”, expresa.

El tercer “mejor mural del mundo” de 2023 es “Copora”, una castrexa guerrera que decora 350 metros cuadrados de una pared de Lugo ubicada entre la catedral, la muralla romana y el Camino de Santiago. La intención de su autor, Yoe 33, fue representar “una abuela lucense en toda regla”, según comenta, y para ello recurrió al museo provincial con la intención de documentarse sobre la tribu de los coporos y observar vestigios arqueológicos que inspiran elementos de su obra como el collar o el cuchillo que luce la mujer del su retrato. “Mi experiencia cuando pintamos en ciudades pequeñas es que acogen mejor este tipo de murales, la gente lo hace suyo”, expresa este artista que comenzó en el mundo del grafiti en su adolescencia y lleva 16 años decorando paredes de ciudades haya donde le llaman con su empresa Concepto Circo.

Esta obra de Yoe 33 está enmarcada dentro del proyecto “Urban cores” para dotar al entorno de la muralla de Lugo de un marco de diseño. Este certamen, por el que se decoran media docena de medianeras al año, sustituye al “Street Fighters”, que durante once ediciones convirtió muros y paredes de la ciudad en lienzos. Como buen grafitero que fue, Yoe 33 (nombre artístico de Manuel Pallín) considera que el arte urbano ha de ser efímero. “Tan efímero, que una vez que lo pintamos y tengo la foto de él acabado ya lo borró de mi mente, sé que el tiempo juega en su contra y que pueden pintar por encima de él”, comenta. Para dar mayor duración a estas obras, el plan es barnizarlas cada cinco años.

“A mí me sale de manera natural dibujar retratos de mujeres, y me interesa porque siempre se ha visto la figura femenina desde el punto de vista de un hombre”

Para Yoe 33 es llamativo que tres obras gallegas hayan sido ganadoras de este concurso internacional, que registró unas 250.000 votaciones en todas las categorías (también existen las modalidades de murales con mayor impacto y más innovadores). También es significativo que los tres premios sean retratos de mujeres, algo que para Lula Goce es lo habitual en su obra. “A mí me sale de manera natural dibujar retratos de mujeres, y me interesa porque siempre se ha visto la figura femenina desde el punto de vista de un hombre”, explica esta artista gallega.

Lula Goce es autora de dos de los 177 murales de gran formato que el Concello de Vigo lleva financiando desde 2015 dentro de su programa de pintado de medianeras y otros elementos verticales con incidencia sobre la vía pública, cuya décima edición se ha aprobado este mismo mes de febrero y supondrá la incorporación de ocho nuevas obras de arte urbano presupuestadas en 180.000 euros. El programa pretende mejorar la imagen urbana de la ciudad Olivia y realzar el paisaje del patrimonio arquitectónico, además de contribuir a poner en valor la obra de los artistas urbanos.

Feminismo, resiliencia y mar en los nuevos murales

Entre los artistas consagrados en la escena mundial que han participado hasta el momento en el evento de arte urbano de Vigo, además de Lula Goce, se encuentran el francés Louis Lambert (3TTMAN), colaborador de la Tate Modern, autor de un muro mosaico de treinta metros en la embajada de España en Hanoi, creador de murales monumentales en Kiev y de una colorista obra en la viguesa calle Urzáiz, el lucense Diego As, autor del mural Julio César en Lugo premiado en 2022 por la plataforma Art Street Cities que plasmó en Vigo el retrato de un soldado francés pintado en una medianera de la avenida de Castelao , la mexicana Moon Venture, que ha trabajado para Adidas y la NBA_y dejó su huella en Vigo en una pista deportiva de la calle Torrecedeira, y el salmantino David de la Mano, con obras en Noruega, Estados Unidos, Francia, Italia y en la calle Urzáiz de Vigo.

El origen del éxito del arte urbano en Galicia se encuentra en festivales tan veteranos como el Desordes Fest, que se lleva celebrando desde 2008 en el municipio coruñés de Ordes por iniciativa de dos artistas locales, Mou y Socram, curtidos en el grafiti, la ilustración, el arte urbano y el diseño gráfico, cuyo estudio, Mutante Creativo, se ha especializado en comisariar eventos de arte urbano. El éxito cosechado en su localidad natal hizo que le fueran llamando para organizar el formato de ese festival a otros municipios y ahora se encargan de organizar el Rexenera Fest de Carballo, el Compostela Contemporáneo en Santiago y el Itsmo Fest en A Coruña, cuya primera edición se celebró el año pasado.

Con una población de algo más de 14.000 habitantes y más de cien murales en espacios urbanos púbicos, Ordes es conocida como la aldea de los grafiti. “Antes de que se normalizaran este tipo de festivales de arte urbano, tuvimos que picar mucha piedra para llevar nuestra pasión a nuestra villa”, comentan Mou y Socram. Siempre defendieron que los murales eran “un revulsivo para una villa sin atractivo turístico ni cultural per se”, y que era una herramienta para transformar espacios abandonados, grises y sin ningún atractivo en una especie de galería de arte urbano a cielo abierto.

En las dieciséis ediciones que se ha celebrado ese certamen de arte urbano internacional en Ordes, han desfilado más de una centena de artistas internacionales de diversas partes de Galicia y del resto de España, así como de países como Estados Unidos, Italia, Alemania, Colombia o Argentina. Algunas obras se han ido deteriorando por el paso del tiempo y por la calidad del material que se empleaba al principio y han ido cobrando nueva vida siendo reemplazadas o renovadas por otras. Quedan pocos muros desnudos en el casco urbano de la población, aunque aún hay algunos para la siguiente edición del evento, para la cual los organizadores han previsto expandirse a otros municipios de la comarca. El objetivo es ampliar y consolidar el primer geodestino de arte urbana de Galicia.

“No somos partidarios de ese tipo de nomenclaturas y ránkings que dicen que un mural es el mejor del mundo porque lo votan seguidores de una cuenta de Instagram”, advierten los promotores del Desordes Fest. “Pero no quitamos mérito a nadie, al menos esas plataformas consiguen que se hable de murales y se ponga el foco en el arte urbano, en el que en Galicia hay un nivelón al que, humildemente, Desordes Fest ha contribuido”, añaden.

Al igual que hicieron los pioneros de Ordes en 2008, el artista de Verín Alex Araújo se ha empeñado en llevar su pasión a su localidad natal, donde el año pasado recreó 23 obras de Bansky. “Nuestra intención era hacer un museo al arte libre del arte urbano y Bansky nos pareció el mejor artista”, explica. Utilizando una plantilla (en lugar de las tres que usa el enigmático artista referente del arte urbano internacional), Araújo fue replicando en varias fases, con el permiso y el apoyo del Concello, murales de Bansky, escogiendo el lugar más adecuado para cada uno de ellos y adaptando las dimensiones a la superficie de la que disponía. “La de los neandertales cazando carros de la compra la pusimos delante del un supermercado, la de una niña con una rueda, junto a un sitio donde aparcan bicis”, explica.

La acogida a este proyecto ha sido buena. “Me llaman de colegios para que les haga una ruta y les explique cada obra; y en el Concello dicen que hay bastantes personas que siguen el mapa que han elaborado para hacer un recorrido”, indica Araújo, autor también de varias obras murales de creación propia. 

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