Quintela de Leirado se queda sin casas para alquiler

Este municipio registra un bum demográfico, de diferentes nacionalidades, que provoca que las viviendas habitables se llenen

Vista de Quintela de Leirado.   | // FDV

Vista de Quintela de Leirado. | // FDV

A.Ferradas

Quintela de Leirado es un municipio ourensano que actualmente tiene menos de 700 habitantes aunque a principios del siglo pasado superaba los 2.000, y durante el mismo destacó su emigración al país africano de Guinea Ecuatorial. Gracias a un proceso de recopilación de información se descubrió que el primer vecino que emigró allí fue Eloy Carretera, en 1896. Tras comprar una plantación de cacao, su éxito atrajo a otros paisanos, y a Quintela de Leirado incluso se conoció como el “Valle de Fernando Poo”, en referencia a la isla de la provincia española en África donde se asentaba la colonia ourensana. Pero en la actualidad este concello a pasado a ser lugar de entrada de inmigrantes, especialmente procedentes de Latinoamérica. Más del 10% de su población son extranjeros.

De Venezuela, Cuba, Colombia, Honduras, y muchos otros países del otro lado del Atlántico, han elegido instalarse a vivir en este concello de la comarca Terra de Celanova, en el que han optado por la opción del alquiler en lugar de la compra de viviendas. Explica su alcalde, José Antonio Pérez, que debido a la precariedad económica estas personas no suelen comprar. Tienen trabajos fuera del municipio, no obstante, hay una familia llegada de Venezuela que montó una explotación ganadera con 200 cabras en una aldea modelo.

En cambio, a Quintela también llegan nuevos vecinos, españoles, que proceden de otras comunidades autónomas, como Cataluña, Madrid, y otras, que sí han comprado viviendas y las han reformado.

Y ante la llegada de tantos nuevos vecinos este ayuntamiento se ha quedado sin casas para alquiler. En cambio, hay algunos inmuebles en venta pero que necesitan ser rehabilitados.

Gracias a estos nuevos vecinos inmigrantes, más de cien personas, y de españoles, Quintela logra mantener su censo de habitantes, en el que más del 50% de su población es de la tercera edad. A mayores, apunta el regidor que los latinoamericanos llegados suelen ser gente joven, y ha contribuido a que haya cinco familias con niños que nacieron en Quintela.