Comienza la reconstrucción del derrumbe sobre la playa de Meira que enfrentó al Puerto de Vigo y Moaña

La empresa Arines comenzó ayer los trabajos de reconstrucción del talud derrumbado sobre la playa de O Cocho, en la parroquia de Meira, en Moaña, que le fueron adjudicados por la Autoridad Portuaria de Vigo el pasado mes de enero por importe de 276.608 euros. Las condiciones meteorológicas impidieron que la obra pudiera comenzar en febrero, como había previsto el Puerto de Vigo que, después de una lucha con el Concello de Moaña, desde el derrumbe en marzo de 2022, por las competencias de la obra, decidió asumirla con la intención de facturar posteriormente el coste al Concello.

El gobierno local sigue defendiendo que el derrumbe se produjo en terrenos que son de competencia de la Autoridad Portuaria de Vigo y que, por lo tanto, la obra debe de asumirla este organismo, mientras que los informes del Puerto apuntan a que el derrumbe de tierras y piedras, se produjo por filtraciones de la red municipal del agua. De hecho en el derrumbe fueron arrastrados trozos de tubería, si bien el informe municipal, encargado a la empresa concesionaria del agua Aqualia, constató que la red estaba en perfectas condiciones.

El Concello de Moaña avala también su postura al hecho de que la Autoridad Portuaria ya había apuntalado este talud en julio de 2019, después de otro corrimiento de tierras y que quedara en peligro el vial superior que conduce a los astilleros de Punta Arroás. Para aquellos trabajos se cerró durante unos días la playa de O Cocho, muy frecuentada por los vecinos de la zona. En 2021, el Concello también la cerró provisionalmente por la rotura de la red de saneamiento.

El Puerto reconstruirá el talud de O Cocho que lleva derrumbado en el arenal desde marzo de 2022

La empresa Arines, según la licitación, tiene un plazo de tiempo de dos meses para la reconstrucción del talud. Todo dependerá de las condiciones meteorológicas. El proyecto constructivo de licitación contempla la construcción de un muro de gravedad, entre la playa y el vial superior, cimentado en el estrato rocoso y ejecutado de manera que no cause el descalce del vial superior. Este muro de escollera tendrá 27 metros de longitud y entre 8,15 y 11,15 de altura, con un ancho de 2 metros.

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