La Policía identifica a un ladrón de flores en Moaña para atajar un vandalismo en auge

Se le imputa un delito de hurto y fue localizado tras arrancar plantas de lavanda en la vía Curros Enríquez | El mismo problema se registró en la nueva calle de Sisalde

Las jardineras de la calle recién humanizada de las que se arrancaron las flores. |  FDV

Las jardineras de la calle recién humanizada de las que se arrancaron las flores. | FDV / Fran G. Sas

El Concello de Moaña ha ganado múltiples zonas ajardinadas en las últimas dos décadas y más recientemente ganó presencia de especies vegetales en el casco urbano con la humanización de nuevas calles. Además, está en su fase final la rehabilitación del Concello Vello con su sorprendente fachada vegetal a modo de jardín vertical. Sin embargo, en los últimos tiempos se multiplican los casos de vandalismo que dañan estos espacios verdes. En concreto se repiten los destrozos y robos de flores utilizadas de modo ornamental. Este problema lo sufre también Cangas, incluso con las flores privadas instaladas por los comerciantes en las fachadas de sus negocios con el objetivo de embellecer la villa.

Ante esta situación en Moaña la Policía Local solicitó la colaboración ciudadana para acabar con los vándalos que roban estas flores y por primera vez en mucho tiempo, ayer por la mañana, consiguió identificar al autor de una de estas acciones. Se trata de un residente en Moaña, varón y de mediana edad que admitió haber robado cuatro plantas de lavanda en el cruce entre la calle de Curros Enríquez y la calle Sisalde. En la margen derecha de esa intersección el Concello acondicionó un pequeña zona ajardinada dentro de un plan de humanización de Curros Enríquez acometido en los últimos meses y que en la práctica permitió extender el área de esparcimiento de los Xardíns do Concello.

El presunto autor del acto vandálico fue visto por vecinos que dieron aviso a la Policía Local. Los agentes le identificaron y recuperaron los ejemplares que los jardineros municipales tratarán de replantar. El identificado fue propuesto para una sanción. Tras comprobar el precio de las flores se determinó que su coste es inferior a los 400 euros, por lo que se trata de un delito de hurto leve que puede acarrear una multa de 1 a 3 meses.

Desde el cuerpo municipal advierten, de todas formas, que en el caso de identificar a un ladrón de flores cuyo importe supere los 400 euros, se expondría a una pena que podría ir de 6 a 18 meses de prisión.

Más de 100 prímulas

Este problema saltó a la luz en el mes de abril, después de inaugurar la nueva calle Elisa de la Peña González en Sisalde. Y es que el día anterior de la inauguración el Concello había plantado más de un centenar de plantas decorativas con flor del género prímulas, acompañando a los nuevos árboles ornamentales. Por la mañana se encontraron con que todas ellas habían sido robadas. Entonces no se pudo coger al autor. El identificado ayer negó cualquier relación con aquellos hechos.

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