Larraga dice que su vacuna corta la transmisión del coronavirus en ratones

Vicente Larraga.

Vicente Larraga. / FdV

EFE

La vacuna contra el coronavirus SARS-CoV-2 que está desarrollando el Centro de Investigaciones Biológicas Margarita Salas (CIB-CSIC) no solo protege a los ratones en los que se ha probado de la enfermedad, sino que además ha demostrado que corta la transmisión del virus. “No solo combate la enfermedad, bloquea la infección”, avanzó a Radio 6 Tenerife Vicente Larraga, el científico que está al frente del equipo que trabaja en esa vacuna de ADN.

La vacuna del equipo de Larraga, una de las diez que están en estudio en España, utiliza un vector de ADN para introducir en el cuerpo del individuo que la recibe genes del antígeno del virus, lo que induce a sus células a producir una proteína del SARS-CoV-2. Ese mecanismo activa la respuesta inmunitaria, porque esas proteínas son reconocidas como extrañas por el organismo y este comienza a generar defensas que protegen ante el verdadero virus.

“Tiene muy buena pinta, por decirlo de forma coloquial”, señaló Larraga, que confía en poder terminar todos los trámites para que este verano les puedan autorizar a comenzar los ensayos clínicos, que determinarán si funciona en humanos tan bien como en los ratones que se emplean como modelos para la COVID-19.

El resultado más importante de los ensayos, insistió Larraga, es que los ratones no solo quedan protegidos contra las consecuencias de la COVID-19, sino que dejan de contagiar al resto de roedores que conviven con ellos. Añadió que otra de las ventajas de la vacuna de su equipo reside en que es sintética, lo que consideran que les permitiría desarrollar con rapidez una adaptación en caso de que el virus vuelva a mutar y escape al efecto de las vacunas utilizadas hasta ese momento.