Un bautizo por cada cuatro entierros

Ourense está a punto de rematar 2023, con una demografía al ralentí. Los últimos datos estadísticos que ha publicado ayer el Gobierno central, a través del Instituto Nacional de Estadística, no dan tregua y la provincia registró un solo nacimiento, por cada cuatro defunciones.

Un auténtico agujero negro que, pese al empuje poblacional que parece generar la llegada de la población inmigrante arroja datos negativos en ese balance del INE, con datos correspondientes a los meses de enero a octubre de este año, en los que el acumulado es de 1.093 frente a las 4.239 defunciones.

Lo datos oficiales hablan por lo tanto de un saldo vegetativo negativo, de una caída de nacimientos respecto al mismo acumulado del pasado en ese mismo periodo de 33 nacimientos menos, y de -129 si se compara con los niños nacidos en esa franja del año 2019.

Son datos relacionados con el envejecimiento de la población de esta provincia, marcado además porque más del 33 por ciento de la misma tiene de 65 años en adelante, y por el éxodo progresivo de la población en edad activa, tanto por estudios como en búsqueda de trabajo, a otras provincias de la comunidad yo del resto de España, mayoritariamente

La media que se ha registrado en estas 42 primeras semanas sería por lo tanto de unos 26 nacimientos en la provincia, frente a más de 100 defunciones. Unas cifras de decesos que dan cuenta, no obstante de la longevidad de la provincia, , pues de las 4.239 personas fallecidas en lo que va de año, 1.500 tenían de 90 años, en adelante.

Un total de 132 ourensanas fueron madres entre los 40 y los 49 años de edad

Los datos de natalidad, en lo que va de año, demuestran también que hay dos franjas de edad de edad mayoritarias para ser madres en Ourense. Así de los 1.093 que fueron madres hasta octubre en la provincia, 371 tenían entre 30 y 34 años, y otras 337 fueron madres en la franja de 35 a 39 años de edad. Es decir que casi el 70% de ourensanas, que tuvieron un hijo tenían entre los 30 y los 39 años, frente a las 23 mujeres de 15 a 19 años que fueron madres de enero a octubre de este año, y otras 65 que estaban entre los 20 y los 24 años de edad. Pero en ese retraso progresivo de la edad de la maternidad, por diferentes cuestiones de tipo social o laboral, se encuentran 120 ourensanas que fueron madres este año con edades de 40 a años de edad, y 12 más que tenían entre 45 y 49 cuando dieron a luz. En otros dos nacimientos las madres tenían 50 años o más.