Un viaje en unas horas del invierno a (casi) la primavera: 18 grados de oscilación térmica

El frío, las heladas y el anticiclón seguirán definiendo el tiempo de estos días, en los que, desde las primeras horas a las centrales, y de nuevo al anochecer, la vestimenta va por capas. Del ambiente gélido de la madrugada y la primera hora, a la sensación más agradable, casi primaveral, del comienzo de la tarde.

En la ciudad de Ourense se registró este lunes la temperatura mínima más baja de lo que va de año, 2,7 grados bajo cero. Con el avance de la jornada, el termómetro fue ascendiendo, hasta una máxima de 15 grados. La oscilación térmica en la capital de As Burgas en el día de ayer se aproximó a los 18 grados.

Una vez solucionado un problema con las baterías de la estación de Meteogalicia, que tuvo al margen de los datos a la zona donde más se siente el frío de la comunidad, Calvos de Randín experimentó el domingo y el lunes los valores más intempestivos de Galicia: -8 y -7,9 grados, sobre las 9 de la mañana.

De esas mínimas se subió este lunes a una máxima de 8,3 grados, lo que supone casi 17 de oscilación.

En A Mezquita, que registró ayer una mínima de -6,8, el ascenso a lo largo del día no fue tan elevado, pero aun así hubo contraste, con una máxima horas después de 7 grados.

En Baltar pasaron ayer de los -6,7 grados de mínima a los 8,7, con una oscilación superior a los 15 grados. En Verín, otra de las zonas de Galicia donde más se notan las heladas, hubo una mínima de -6,7 grados este lunes, y una máxima de casi 11, por lo que la variación de temperatura se acercó a los 18 grados, como en el caso de la ciudad de Ourense.

Hoy continúa la alerta amarilla por frío en el sureste de la provincia, si bien las temperaturas experimentarán “un ligero ascenso”, según la predicción de Meteogalicia. Las nieblas matinales darán paso, un día más, a cielos despejados. El miércoles, las mínimas serán más altas.

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