La UVigo impulsa un instituto de investigación de física y tecnología aeroespacial en Ourense

La Universidad de Vigo aprobó en diciembre de 2021 el reglamento para la creación y gestión de los institutos de investigación y con ese marco normativo ha propuesto la implantación en Ourense del Instituto de Física y Tecnología Aeroespacial, IFTA.

El proyecto es novedoso y se encuentra por ahora en fase administrativa. De hecho, el documento que recoge la memoria completa y el plan estratégico para su puesta en marcha todavía se encuentra en período de exposición pública. Este plazo, en el que se podrán presentar alegaciones, finaliza el 31 de marzo, y una vez resueltas las consultas deberá pasar por los órganos de gobierno de la institución. Posteriormente, la Universidad de Vigo podrá solicitar a la Xunta de Galicia su acreditación, un paso que ampliará sus opciones para recibir fondos de apoyo a la investigación.

El equipo

El proyecto será impulsado por 19 investigadores con vinculación permanente a la UVigo, entre los que se encuentran profesores de los campus de Ourense y Vigo. Se trata de Carla Tovar, Claudio Cerdeiriña, Diego González, Elena Martín, Humberto Michinel, José Ramón Salgueiro, Benito Vázquez, Higinio González, Matías García, Ricardo Bendaña, Ana María Ulla, Daniele Tommasini, Antonio Ferriz, Iván Area, Begoña Cid, Ángel Paredes y Manuel Perez. La agenda científica de este equipo se estructurará en cinco áreas: fluidodinánica y termodinámica, tecnologías fotónicas, aeronaves no tripuladas, ciencia y tecnología del espacio y modelización y simulación.

La sede del IFTA se emplazará en la ciudad de As Burgas, en la Escola de Ingeniería Aeronáutica y del Espacio, pendiente, por otro lado, de contar con un edificio propio en el campus. El director de la escuela, Humberto Michinel, avanzó que en las próximas semanas se licitará el anteproyecto.

Un sector emergente

El reglamento para la creación de institutos de investigación en la UVigo señala que se tendrán en cuenta las peculiaridades de los diferentes campus, así como la diversidad de grupos de investigación, con el objetivo de avanzar hacia la excelencia. En el caso del IFTA, el plan estratégico incide en que la apuesta por un sector emergente en Galicia como es el aeroespacial recibió el impulso definitivo en 2016 con la implantación del grado en Ingeniería Aeroespacial en el campus. Y en dicho centro, destaca el documento, “han ido surgiendo grupos de investigación cuyas actividades se centran en temas que integran la física aplicada y la industria aeroespacial, desde la sonorización de aeronaves no tripuladas a las investigaciones espaciales”.

En este contexto, el IFTA “nace con la visión de posicionarse como un centro de investigación de excelencia y transferencia tecnológica sectorial de referencia en los campos de la ingeniería aeroespacial y la ingeniería física, conectada con las redes nacionales e internacionales más relevantes”. En esta línea, la memoria en exposición sostiene que este instituto será estratégico para el desarrollo económico y social de Galicia. Además, propone una planificación “eficiente” basada en la gestión de recursos propios de los grupos de investigación asociados a la Escuela Aeronáutica.

Humberto Michinel señala que la creación de un instituto de investigación ofrece ventajas como la de potenciar la “atracción y retención de talento” ya que, a diferencia de una escuela en la que el enfoque es más académico, “en un instituto o centro de investigación se buscan perfiles puramente investigadores de excelencia internacional”. Señala que comunidades como Cataluña o el País Vasco ya disponen de centros muy relevantes. “Se trata de seguir esta estela”, apunta.

Así, a través del IFTA, los 19 investigadores se proponen aportar al sector aeronáutico y aeroespacial gallego “soluciones tecnológicas innovadoras que puedan dotar al tejido industrial de un diferencial competitivo y posicionamiento internacional”.

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