La ampliación de Castiñeiras abre el parque a usos comerciales, turísticos y de servicios

La ampliación del polígono empresarial de Castiñeiras, en Bueu, permitirá no solamente duplicar su superficie útil, sino también multiplicar sus usos, sumando a los puramente industriales los comerciales, de turismo, ocio y prestación de servicios, o dotacionales de todo tipo. Así se recoge en las ordenanzas que regirán el funcionamiento de Castiñeiras, y que el Concello de Bueu estudia después de que el Instituto Galego de Vivenda e Solo de la Xunta de Galicia aprobase inicialmente el plan el pasado mes de diciembre.

La nueva normativa que entrará en vigor con la ampliación del polígono industrial flexibilizará de forma notable las posibilidades de implantación de negocios en el ámbito. La aprobación del Plan Xeral de Ordenación Municipal de Bueu ya había apuntado esa opción pero será ahora cuando se abra el abanico de forma definitiva.

La ampliación de Castiñeiras afecta a más de 300 parcelas y el IGVS tramita el plan

El documento recoge, no obstante, que el 55 por ciento de los nuevos terrenos deberán estar destinados al uso industrial. El porcentaje restante se reparte entre los usos terciario (35 por ciento) y dotacional (10 por ciento). En el primero de ellos las posibilidades son múltiples, al entrar en el mismo las actividades comerciales, de turismo, ocio o prestación de servicios. También serían compatibles diferentes usos dentro del mismo edificio (una empresa con tienda o con un restaurante, por ejemplo).

El concejal de Urbanismo de Bueu, Martín Villanueva, subraya el total apoyo del concello a esta línea de trabajo. “Creemos que es algo necesario para que el polígono sea más atractivo. El ejemplo más claro es que pueda haber un local de restauración para que puedan comer allí los trabajadores”, señala. Pero no solo eso, las ordenanzas permitirán la instalación futura de un centro comercial o incluso de un hotel en los terrenos de Castiñeiras.

La ampliación de Castiñeiras reserva casi 90.000 metros a zonas verdes y dotaciones

En cuanto al uso dotacional incluye las infraestructuras de comunicación y las zonas verdes, además de equipamientos que pueden estar relacionados con los servicios públicos o culturales (una biblioteca o un museo, por ejemplo). Cabe recordar que una de las apuestas de los promotores de esta iniciativa, los empresarios de Aproínter, ha sido la de crear un cinturón verde en que rodea a todo el parque con sendas y áreas verdes para convertir el lugar también en un espacio de esparcimiento para vecinos y visitantes.

Cuatro ámbitos de actuación

El proyecto de ampliación aprobado inicialmente recoge un ámbito de actuación definitivo de 196.854 metros cuadrados distribuidos en cuatro áreas. La zona norte consta de 52.613 metros cuadrados y se sitúa en paralelo a la nave de Nodosa siguiendo el vial hacia Bon. La zona este se sitúa entre el cementerio y la fábrica de Alonso (por detrás del tanatorio y del parque de bomberos) y comprende 84.610 metros cuadrados. El ámbito oeste tiene 47.750 metros cuadrados y va por detrás de la zona en la que están situados Lago Paganini y la ITV, y, finalmente, el ámbito sur cuenta con 9.865 metros cuadrados e iría junto al cementerio.

Este último ámbito sur formaría parte de una de las parcelas a favor del concello, que iría destinada precisamente a la ampliación del camposanto buenense. No sería el único solar del que se beneficiaría el concello buenense, ya que tendría otro más destinado a albergar usos dotacionales. En paralelo, Villanueva recuerda que no sería el único beneficio directo para el concello. “El 10 por ciento del aprovechamiento lucrativo de las edificaciones recae en el concello, así que recibiremos alguna parcela más”, explica. En este sentido, apunta que el gobierno local es el que deberá aplicar en el futuro estas ordenanzas, por lo que es el primer interesado en que “sean sencillas y fáciles de aplicar”.

Tras su aprobación inicial por parte del IGVS, el proyecto de ampliación de Castiñeiras se encuentra en la fase de solicitar informes a las administraciones implicadas. En el caso de las autonómicas, como Augas de Galicia o Patrimonio, el tiempo para emitir su dictamen es de tres meses, mientras que el Estado dispondría de cinco. En el caso del concello, dispone de un mes para expresar sus aportaciones.

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