El proyecto de la depuradora de Ons sigue adelante sin alegaciones y un coste de 877.000 euros

La mejora se sometió a exposición pública porque incluye un punto de vertido a la ría, con un caudal previsto de 17.600 metros cúbicos anuales | Medio Ambiente aún espera por varios informes sectoriales

La zona de la isla de Ons donde se ubican las instalaciones de la depuradora de aguas residuales. |   // MARÍA SAGUNTO

La zona de la isla de Ons donde se ubican las instalaciones de la depuradora de aguas residuales. | // MARÍA SAGUNTO / david garcía

El proyecto para la mejora de la depuración de las aguas residuales en la isla de Ons continúa adelante sin que se hayan recibido alegaciones durante el periodo de exposición pública y a la espera de los informes sectoriales del resto de organismos implicados para poder iniciar los trabajos. La inversión prevista supera los 877.000 euros y los trabajos se ejecutaran por medio de la empresa pública Tragsa, a la que se le adjudicó un conjunto de obras para la mejora del ciclo integral del agua en el Parque Nacional Illas Atlánticas por un montante de 1,4 millones de euros.

A principios de verano la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda inició un trámite de exposición pública, que incluía la solicitud de autorización para un punto de vertido al mar de las aguas residuales una vez tratadas en la nueva estación depuradora de Ons. El caudal que se preve verter al mar es de 17.600 metros cúbicos anuales y el proceso de información pública se articuló a través del ente público Augas de Galicia, que depende de la Consellería de Infraestruturas. Desde la Xunta de Galicia confirman que ese plazo ha finalizado sin que se recibiesen alegaciones y por tanto continúa adelante con la tramitación para intentar arrancar los trabajos durante este mismo otoño.

La memoria del proyecto reconoce que las actuales instalaciones presentan un “riesgo elevado de fallo estructural”, por lo que se hace urgente una intervención tanto en la estación depuradora de aguas residuales (EDAR) y en estación de bombeo de aguas residuales (EBAR) del puerto de la isla. Los técnicos recuerdan que las actuales instalaciones fueron proyectadas hace más de una década y que fueron objeto de varias reformas. “Su funcionamiento nunca fue satisfactorio, debido a múltiples factores”, reza el proyecto. Uno de esos inconvenientes es que los parámetros para el diseño de la depuradora “parten de una formulación teórica de cargas que nada tiene que con las de la actualidad; en la isla se da una afluencia turística que hace necesario considerar la necesidad de actualizar los datos”, añade el texto.

La intervención que se plantea pasa por implantar dos reactores biológicos en paralelo, uno con capacidad para tratar 10 metros cúbicos diarios y otro hasta 100 metros cúbicos al día. Es lo que los técnicos denominan una “solución flexible”, que permitirá que fuera del periodo turístico esté operativo únicamente el reactor pequeño y durante la época de mayor afluencia puedan funcionar los dos para atender a toda la población. Los trabajos en la EDAR se completan con un sistema de desodorización para que sea un espacio “libre de olores” y por la implementación del conocido como sistema de desinfección terciario, que se basa en el empleo de rayos ultravioleta. Con esa radiación se consigue reducir al mínimo la concentración de coliformes fecales en las aguas residuales depuradas, que podrían ser vertidas al mar “garantizando las aguas de baño”.

En lo que se refiere a la EBAR el proyecto técnico apuesta por sustituir las actuales bombas e instalar otras que incorporen tecnología de comunicación remota, así como una alta fiabilidad y flexibilidad.

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La isla bueuesa ya superó el periodo de máxima afluencia estival, que suele tener su punto álgido en el fin de semana de las fiestas de San Xaquín y que fueron el 19 y 20 de agosto. A lo largo de este mes el cupo de 1.300 visitas diarias se agotó prácticamente en todas las jornadas.

Los días 1 y 2 quedaron 169 y 11 vacantes respectivamente debido a las condiciones meteorológicas y luego solo quedaron plazas libres a última hora los días 16 y 18 de agosto, con dos vacantes cada día.

El último fin de semana del mes veraniego por excelencia también registró otro lleno, que se repitió ayer lunes.

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