La ansiada estación intermodal de Vigo tendrá que seguir esperando casi dos meses después de su finalización. A pesar de que los trabajos de asfaltado y señalización de la rampa de acceso se han acelerado para cumplir el compromiso del alcalde de que el día 31 de julio estarían listos, la ausencia de los permisos solicitados por la Xunta de Galicia hace un mes al Concello provocarán que hasta después de agosto no pueda emplearse la nueva estación de autobuses de Urzáiz.
Esta noticia suma un nuevo retraso a una obra que fue entregada el 10 de junio y en la que usuarios y gestores del centro comercial Vialia han reclamado celeridad. Después de un mes en el que el trasiego de trabajadores había disminuido en la zona después de un último año frenético, la fecha límite de este lunes en esta rampa de 200 metros ha sido clave para que desapareciera el material de obra. Al mismo tiempo, se han pintado las líneas de los carriles y se han hormigonado los muros que servirán para delimitar los carriles en el tramo urbano del final de la AP-9 o el propio acceso a los andenes de la estación de autobús.
En una carta al alcalde de la ciudad, Marta Fernández-Tapias solicitaba ayer que facilite la información solicitada por la Consellería de Infraestructuras hace un mes . Al mismo tiempo, vuelve a reclamar que desde el Concello pongan “todo lo que esté en su mano” para que los trabajos se agilicen en las actuaciones pendientes, siendo el túnel de acceso de la Autopista al párking de Vialia el que muestra mayores retrasos ya que no estará finalizado hasta octubre.
Un mes para informar
A pesar de que la Xunta envió hace casi un mes su primera misiva al gobierno local para acordar una solución provisional que permitirá inaugurar la intermodal después de invertir 18 millones de euros en ella, por el momento no han recibido respuestas. Tras la última reunión entre Infraestructuras y Concello el pasado 7 de julio, ambos organismos se acusaron mutuamente de no tener que realizar los trámites burocráticos necesarios para el traslado desde la terminal de la Avenida de Madrid.
El más importante sería el permiso del Ministerio de Transportes para utilizar el ramal que forma parte de la Red de Carreteras del Estado ya que el acuerdo inicial obligaba a esperar a la finalización de todos los accesos. También está por resolverse el uso del suelo ya que la mayor parte de los terrenos del nuevo edificio continúan siendo propiedad del Adif.
El ejecutivo autonómico ha fijado en cuatro semanas el plazo necesario para informar a todos los usuarios y operadoras de los cambios en el mapa de rutas de la ciudad. Esta modificación mantendrá aquellas rutas que no tenían el edificio de la Avenida de Madrid como origen o destino, como es el caso de las de O Morrazo que dan servicio al Areal y Bouzas. Además, las modificaciones horarias serán mínimas para ajustarse a los nuevos tiempos de viaje hasta el complejo intermodal de la calle Urzáiz.
El túnel de Lepanto apura su finalización
Donde también se han notado los avances tras varios retrasos y meses de paralización es en el nuevo túnel de Lepanto que servirá de primer acceso de la ciudad a la Autopista del Atlántico. El paso subterráneo está completamente asfaltado y señalizado e incluso la Policía Local lo ha visitado antes de su puesta en servicio, que podría llegar este verano.