Así mata el plástico en ríos y mares

Un pez con una anilla al cuello, prueba de los efectos de la basura marina

Un pez condenado a morir tras quedar atrapado por la anilla plástica de una botella. En la foto, tomada en el río O Con (Vilagarcía), se aprecia la herida que le ha producido.   | //  M. MÉNDEZ

Un pez condenado a morir tras quedar atrapado por la anilla plástica de una botella. En la foto, tomada en el río O Con (Vilagarcía), se aprecia la herida que le ha producido. | // M. MÉNDEZ

Manuel Méndez

Manuel Méndez

Los plásticos están asfixiando tanto a la ría de Arousa como a los ríos que la abastecen, desde el Ulla al Umia, pasando por el que atraviesa el centro de Vilagarcía, el río O Con.

Como todo el mundo sabe, esos plásticos resultan letales para todo tipo de especies, ya que afectan tanto a los peces y mamíferos marinos como a las aves.

A la postre, acaban teniendo consecuencias para la salud pública, de ahí la necesidad de seguir concienciando a la sociedad y de desarrollar nuevos planes de saneamiento y lucha contra la basura marina.

Imágenes repetidas en O Con

Solo así se evitarán imágenes como las que se repiten con excesiva frecuencia en el río O Con, al que llegan a diario plásticos y residuos que acaban en la ría, sobre todo los martes y sábados, cuando se celebra el tradicional mercadillo ambulante y se generan ingentes cantidades de residuos plásticos que, en muchos casos, acaban en el agua.

Un pez herido por los plásticos.

Un pez herido por los plásticos. / M. Méndez

Claro que no es el único río afectado por este tipo de vertidos, ni mucho menos, pero sale a colación tras detectarse la presencia de un pez condenado a morir tras quedar atrapado por la anilla plástica de una botella.

Como un collar

Como si fuera un collar, esa anilla, que le causó una importante herida, rodeaba su cabeza y le dificultaba la movilidad, impidiendo que se alimentara como los demás.

Es solo un pez, pensarán algunos, pero no cabe duda de su imagen, con la anilla plástica alrededor, puede ser fiel reflejo de la difícil situación que atraviesan los mares del mundo.

Respecto al río O Con, ya se explicó en ocasiones anteriores que es un foco de contaminación constante, sobre todo de aguas fecales.

La buena noticia es que va camino de salvarse, pues está en marcha un ambicioso plan de mejora impulsado por la Xunta y presupuestado en diez millones de euros.

Cuando las obras actualmente en marcha se completen, dentro de un par de años, el volumen de vertido medio anual del río O Con pasará de los 771.376 metros cúbicos actuales a poco más de 20.000, lo cual se antoja un importante paso al frente para salvaguardar la salud del propio cauce fluvial y de toda la ría arousana.

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