Santos insiste en que ya “pasó tiempo de sobra” para que las urgencias vuelvan a Moaña

Vecinos de Moaña cumplieron 119 semanas consecutivas de su batalla para reclamar el regreso de las urgencias al centro de salud y volvieron a concentrarse ante la Casa do Mar. La alcaldesa, Leticia Santos, en el turno de discurso y acompaña por el portavoz de la Plataforma en defensa da sanidade pública, Gabriel Ferral, dijo que se entra en una semana simbólica porque el 14 de marzo de 2020 el Estado decretaba el estado de alarma por el COVID y confinaba a todos. Tuvo palabras de reconocimiento para el personal sanitario, que en aquel momento carecía de medios para protegerse, y con su sobreesfuerzo ayudó a sacar adelante esta crisis sanitaria, incluso se carecían de datos y que, en aquel contexto, el actual conselleiro de Sanidad en funciones y gerente entonces del área sanitaria de Vigo, Julio García Comesaña, le llamó para centralizar las urgencias de posibles casos de COVID en Cangas porque se iba a establecer un circuito especial. Añade que, a los pocos días, en abril, volvió a llamarla ya que dada la situación tenían que llevarse todas las urgencias a Cangas. La alcaldesa recuerda que él les aseguró que iba a ser una medida provisional mientras durara la urgencia sanitaria: “Respetamos aquella medida vinculada a aquel contexto”. Añade que la situación mejoró afortunadamente con las medidas de precaución, en la que Moaña fue ejemplar, y las vacunas, “pero lo que no volvió fue el servicio de urgencias”.

Santos tiene claro que toda la sociedad cumplió con lo que se le pidió, pero quien no lo hizo fue la Consellería de Sanidade, por lo que ayer volvieron a gritar alto y claro que no se conforman con tener las urgencias en Cangas “son de Moaña y tienen que volver a Moaña. Ya hubo tiempo de sobra para adaptarse, organizarse, reforzar el personal o medios que se necesiten para que vuelvan”. Pidió también eliminar la precariedad con la que se ofrecen las plazas sanitarias, ya que les hacen cambiar de ubicación incluso día a día y que se refuercen las ambulancias. Ferral demandó que más vecinos acudan a las protestas, dijo que echaba en falta a los médicos en ellas, que parecía que hay miedo, y que les prohibían poner carteles en el centro de salud con las ausencias sin cubrir como antes hacían en las puertas.

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