La Xunta paga la nómina del personal de las ambulancias, que suspende la huelga

La Consellería de Sanidade tramita un contrato de emergencia con otra empresa concesionaria | Abona los salarios de abril y los sindicatos renuncian al paro de los días 2 y 3 de mayo

La ambulancia de Cangas, con las ruedas pinchadas en un acto de sabotaje de los últimos días.

La ambulancia de Cangas, con las ruedas pinchadas en un acto de sabotaje de los últimos días. / FDV

El conflicto laboral de los trabajadores de las ambulancias de Cangas, Moaña y Vigo empieza a encontrar soluciones. Ayer, tras una nueva reunión entre el comité sindical –CIG, CCOO y USO–, la Fundación Pública Urxencias Sanitarias de Galicia-061 y la Consellería de Sanidade, los trabajadores acordaron suspender la convocatoria de huelga prevista para los días 2 y 3 de mayo. La razón está en que la Xunta, “consciente de la situación y de la preocupación de los trabajadores de Ambulancias del Atlántico” acometió el abono de las nóminas del mes de abril. Algunos de los trabajadores llevaban dos meses de retraso en el pago a raíz del la “desaparición” del empresario de la concesionaria. La Xunta, que trabaja para intervenir la empresa, aseguró ayer que trabajaba de “forma responsable” para garantizar que los ciudadanos no se vean privados de su derecho a recibir la asistencia sanitaria.

Desde los sindicatos atribuyen a su trabajo “y al apoyo de la clase trabajadora” el logro de cobrar sus nóminas hasta el día 1, que era el requisito que ponían para suspender la huelga. En lo peor del conflicto se llegaron a pintar las ambulancias y en los últimos días incluso se pincharon las ruedas de la de Cangas.

En la reunión de hoy se alcanzó el compromiso de que Sanidade y el 061 mantengan “una supervisión constante” de Ambulancias del Atlántico, hecho que los sindicatos consideran “imprescindible” para un buen funcionamiento de la empresa y la resolución de los múltiples problemas que existen en la actualidad.

Tras la renuncia de la empresa a los contratos públicos del servicio de transporte urgente y programado, la Xunta inició ya el proceso de tramitación de un contrato de emergencia para que otra empresa asuma la concesión hasta que se convoque una nueva licitación.

Los sindicatos dieron un nuevo ultimátum a la Administración. Piden que en una nueva cita el 9 de mayo se comprometan a nombrar a una persona interlocutora de la empresa diferente de la dirección actual. Quieren la presencia de personal de la Consellería de Sanidade en todas las reuniones entre la representación legal de los trabajadores y la compañía. Piden que se entreguen todas las hojas de las nóminas al personal y la gestión de los problemas actuales con empresas proveedoras de suministros como combustible, oxígeno o lavandería.

Amenaza de desahucio de la base de Cangas

Las deudas de la empresa Ambulancias del Atlántico en O Morrazo ya incluyen el pago de los alquileres de sus bases, al menos en el caso de Cangas. Representantes sindicales de la plantilla explican que hace unos días recibieron la llamada de la propiedad del local ubicado en Longán para interesarse por la situación y para comunicar que la empresa le debería al menos dos meses de alquiler. “Está muy molesta porque no tiene con quien contactar porque los responsables están desaparecidos o de baja y asegura que si no cobra el próximo mes podría iniciar los trámites legales para instar el desalojo o desahucio de la base”, explican desde el comité de huelga. La representación sindical de la plantilla de Cangas, Moaña y Vigo asegura que tiene constancia de que Ambulancias del Atlántico debe el pago de más alquileres en la zona y ponen cifras a la deuda acumulada en combustible. “El propio personal de oficinas nos confirma que solo en repostajes la deuda de la empresa asciende a 120.000 euros”, apuntan desde el comité de huelga. Esta situación va camino de hacerse insostenible y tiene repercusiones sobre el trabajo de la plantilla. “Ahora mismo, en horario diurno, solo podemos repostar en la estación de servicio de Repsol en la Avenida de Madrid, que es la única que nos fía y confía en poder cobrar más adelante”, apuntan.

En horario nocturno la situación es incluso más compleja. “Tenemos que ir hasta Mos, a unas instalaciones de la propia empresa en las que hay un surtidor y que aún tiene algo de combustible en reserva”, denuncian. Estos desplazamientos afectan a los tiempos de respuesta del propio servicio. “Por ejemplo, en la madrugada del domingo después de realizar un servicio en Povisa tuvimos que ir a Mos a repostar antes de volver a Cangas. La situación es más grave aún cuando la ambulancia está ‘medicalizada’, con personal del PAC a bordo, porque con estos trayectos tardan aún más en regresar al centro de salud”, señalan.

El comité de huelga estima en base a diversas fuentes que la deuda actual de la empresa podría rondar los 500.000 euros, una cantidad que incluye alquileres, combustible, créditos bancarios o el pago por el renting de las ambulancias. Otro de los puntos de preocupación es el mantenimiento de los vehículos ya que los talleres mecánicos también están entre los afectados por la deuda. “No sabemos qué pasará cuando uno de los vehículos tenga un problema o haya que cambiar alguna rueda”, advierten. Ambulancias del Atlántico contaba con dos mecánicos para atender parte de las posibles incidencias mecánicas, pero según el comité de huelga se encuentran de baja precisamente a raíz de esta situación.

“A mayores de esa deuda aún habría que sumar dos meses de impagos a la Seguridad Social y parte de los salarios de la plantilla”, concluyen. La plantilla tiene convocada una huelga para los mañana jueves y el viernes y desde el comité de huelga muestran su malestar porque a pesar del compromiso de la Xunta de Galicia de intervenir la empresa “de momento no sabemos nada de la persona que debe encargarse de esa intervención a pesar de que esta semana llamamos para solicitar información”.

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