Una pieza más para el escaparate de buques irrepetibles de Vigo

El ferri mixto de casi 90 metros que construirá Armón en Astilleros Ría de Vigo para la Polinesia Francesa es el último de una lista de barcos singulares construidos por los astilleros de las Rías Baixas

Vigo

El contrato de Astilleros Ría de Vigo, la antigua Barreras, para la fabricación de un ferri mixto, concepto que mezcla el transporte de pasajeros (incluyendo camarotes de lujo) con los contenedores, volvió a demostrar la capacidad de los astilleros de las Rías Baixas para reinventarse y abarcar nichos. El buque de casi 90 metros de eslora, que se entregará en 2026, será el último de una larga lista de embarcaciones singulares o simbólicas construidas en Galicia y que han sorprendido a armadores de todo el mundo por su complejidad, especialización, lujo o calidad.

Hoy propiedad de Armón, la antigua Hijos de J. Barreras fue pionero en algunas nuevas construcciones, desde los pesqueros que provocaron el despertar del sector naval vigués a buques offshore y de pasaje. De sus gradas salieron, por ejemplo, algunos de los ferris más grandes que operaban en aguas españolas, como el Abel Matutes, de 190 metros y para Baleària.

Si bien no pudo completar con éxito el que sería la joya de la corona de sus más de 100 años de historia, el crucero ultrapremium para The Ritz-Carlton Yacht Collection, el hoy conocido como Astilleros Ría de Vigo también se hizo un nombre en los buques para las plataformas de hidrocarburos. Uno, sin duda, fue el primer flotel concebido como tal, el Edda Fides, de 130 metros de eslora por 27 de manga y con capacidad para acomodar a 600 trabajadores de plataformas de extracción de hidrocarburos.

El "Abel Matutes", construido por Barreras para Baleária

El "Abel Matutes", construido por Barreras para Baleária / Barreas

Aquel buque, entregado en 2011 a la armadora noruega Østensjø Rederi, marcó un antes y un después por los servicios que integraba. Y fue clave para que Petróleos Mexicanos (Pemex) encargase una unidad similar al astillero vigués en 2013, el Reforma Pemex, para acoger a 608 pasajeros y 91 tripulantes.

Antes de que el mercado offshore pasase por una dura época por la caída de los precios del crudo y la suspensión del antiguo tax lease en 2011, MetalShips & Docks, la división de acero del grupo vigués Rodman, también se hizo un nombre. De sus gradas han salido buques como el North Sea Giant, que ganó en 2012 el premio Offshore support vessel of the year, el Deep Orient, el North Ocean 105 o el Lay Vessel 108. Este último, un pipelay construction support vessel (PLSV), es decir, un barco especializado en tendido de tuberías submarinas para las plataformas de extracción de petróleo, tiene 135 metros de eslora y 27 de manga y está considerado uno de los más buques sofisticados de su segmento.

Más recientemente, el astillero de Teis logró completar y entregar con éxito el Sea Cloud Spirtit, el segundo velero más grande del mundo con sus 138 metros de eslora por 17,2 de manga para acomodar, con todo tipo de lujos, a 136 pasajeros. Pero si hablamos de lujo y de veleros, tampoco podemos dejar de lado el trabajo de Freire Shipyard.

La atarazana de la familia Freire realizó en 2017 el Bima Suci, el mayor buque escuela construido en la Ría, con 110 metros de eslora y capacidad para alojar a 200 personas a bordo. Encargado por el Ministerio de Defensa de Indonesia para el entrenamiento de cadetes de la Armada nacional, ha representado un desafío por el velamen que despliega: 3.350 metros cuadrados de paño en un aparejo Bricbarca (tres palos, al estilo bergantín).

Y a esta colección de hitos se suma, sin lugar a dudas, el Renaissance, el mayor yate privado construido en España, una joya exclusiva de 112 metros de eslora y un arqueo bruto de 7.200 toneladas. Plagado de lujos, y pensado para su alquiler vacacional, está disponible a partir de 3 millones de euros por semana. Ahora, el astillero trabaja en otro megayate, en este caso de 107 metros.

En lo que respecta a Armón, el nuevo ferri mixto para la Polinesia Francesa, contrato adelantado por FARO, se suma a otros muchos que fue construyendo en los casi 25 años que lleva en la ciudad el grupo asturiano. Una lista en la que destacan, sobre todo, dos construcciones recientes: por un lado, el ferri eléctrico para Baleària, el Cap de Barbaria, entregado el año pasado; por otro, el oceanográfico Odón de Buen, encargado por el Instituto Español de Oceanografía (IEO), que con sus casi 85 metros se convertirá (cuando se complete) en el más grande de la flota científica patria.

El último oceanográfico botado en Vigo, el de Armón para Islandia

El último oceanográfico botado en Vigo, el de Armón para Islandia / Chou Pesqueira

Armón fabrica varios buques científicos en la actualidad (para Islandia, Nueva Zelanda, Azores u Holanda), un nicho en el que Freire también es un gran exponente, con auténticos laboratorios flotantes como el Sarmiento de Gamboa, el RRS Discovery, el Janan, el Belgica o el BAP Carrasco de la Marina de Guerra de Perú. El RRS Discovery, de 99,7 metros de eslora y propiedad del Consejo de Investigación del Medio Ambiente Natural del Reino Unido (NERC, en sus siglas en inglés), había sido elegido por votación popular el buque más destacado construido en España en 2013, en el concurso que todos los años organizan los ingenieros navales.

Ya en la ría de Pontevedra, Nodosa ha ido adquiriendo un peso singular en los últimos años, desde que se hizo con las instalaciones de la desaparecida Factoría Naval de Marín. De sus instalaciones han salido algunos buques singulares, como son la pareja de portacontenedores para Royal Arctic Line, el Tilioq Arctica y el Arpaarti Arctica, pensados para aguas de Groenlandia, o los submarinos de pasaje para turismo, los subcat. Aunque si en algo se ha hecho un nombre el astillero de Marín es en el nicho de los pesqueros, con una quincena de buques desde que cambió de atarazana.

En su lista de buques entregados destacan, por ejemplo, el primero que comenzó la renovación de la flota gallega en Malvinas, el Monteferro, una unidad de 63 metros de eslora, al que se sumarán otros arrasteros de gran porte para aguas Malvinas como los actuales Prion y Argós Berbés, para participadas de Pescapuerta y Pereira, respectivamente. En esta lista también podría figurar, por ejemplo, el Voyager, contratado hace escasas semanas con la neozelandesa Talley’s Limited.

Cabe destacar, aunque en este caso no se trate de acero, del trabajo que realiza en fibra Rodman Polyships. Sin ir más lejos, de la factoría de Moaña salió la patrullera más grande de Europa construida en este material, un barco de 43 metros para la Agencia Tributaria, un modelo Rodman 138 con autonomía para 2.000 millas y una capacidad para 18 personas.

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