Cinco días para completar la plantilla

Al Celta le esperan cinco días de mucha gestión para cerrar la plantilla de la temporada de su centenario. El club ya ha concretado los fichajes del portero Vicente Guaita y del delantero Anastasios Douvikas, por lo que únicamente le falta por firmar la contratación de un mediocentro para dar por finalizado el capítulo de incorporaciones. Por otra parte, la secretaría técnica continúa buscando destino a jugadores que no cuentan para Rafa Benítez: Sergio Carreira, Miguel Baeza y Gonçalo Paciencia. Tampoco se descarta la salida de Agustín Marchesín.

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En A Sede estaban pendientes del traspaso de Gabri Veiga para acelerar las incorporaciones de las tres últimas piezas que Benítez había solicitado para completar la plantilla, a la que ya se habían incorporado Carles Pérez, Jonathan Bamba, Carlos Dotor, Manu Sánchez y Carl Starfelt. El sexto fichaje llegó ayer a Peinador. Se espera que Douvakis pase hoy reconocimiento médico y firme el nuevo contrato para incorporarse de inmediato a los entrenamientos. También se da por seguro que Güaita forme parte del proyecto céltico en las próximas horas.

Con la llegada del portero valenciano, que jugó los últimos años en el Crystal Palace, el Celta intentará negociar la salida de Marchesín. El guardameta argentino se ha recuperado en un tiempo récord de siete meses de la grave lesión que sufrió en el tendón de Aquiles y desde México llevan semanas señalando al céltico como próximo refuerzo del América.

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El cierre del mercado de fichajes del verano concluirá a las doce de la noche del viernes 1 de septiembre, por lo que el Celta dispone de un plazo de cinco días para dejar perfilada una plantilla en la que han causado baja Hugo Mallo, Gabri Veiga, Javi Galán, Óscar Rodríguez, Augusto Solari, Denis Suárez y Haris Seferovic.

Una vez que se completen las ocho nuevas incorporaciones (con Guaita, Douvikas y un centrocampista), a Benítez le seguirán sobrando jugadores. Desde el principio del curso, el madrileño no cuenta con Carreira y con Baeza, a los que el club les busca una cesión como la que se concretó la semana pasada con Jose Fontán en el Cartagena.

Más complicadas se presentan las gestiones para desprenderse de Paciencia. Al portugués le restan dos años de contrato, por lo que no resultará fácil un acuerdo que facilite una salida pactada si no encuentra un destino que colme sus expectativas.

Desde A Sede también intentaron traspasar a Renato Tapia, que se mantiene firme en su deseo de completar el año de contrato que le resta en Vigo después de rechazar su salida al Olympique de Lyon, cuando existía un acuerdo entre ambos clubes. El internacional peruano jugó unos minutos contra el Real Madrid después de que sonase como refuerzo para varios equipos de Primera División. Todas estas situaciones tendrá que resolverlas el Celta en los próximos cinco días.