El coste de la vida reduce la aportación de alimentos y las peticiones de ayuda suben

La Operación Quilo, la iniciativa solidaria que nació con la entidad juvenil Amencer hace 36 años, consiguió en 2021 un total de 15.509 kilos de alimentos, 5.620 kilos de juguetes y 15.900 kilos de ropa. Este año, las aportaciones de comida han bajado, 9.768 kilos, y también las de ropa, 9.200 kilos. Solo ha aumentado la aportación de juguetes, 6.200 kilos en esta edición.

La caída de la recaudación de alimentos en casi 6 toneladas contrasta con un aumento de la demanda, según confirman las parroquias. “La crisis económica está impactando en la clase media, de la que depende fundamentalmente la Operación Quilo. Igual una familia que antes podía dar 5 kilos este año ha dado 2. El gran problema que tenemos es que hay mucha gente que necesita ayuda y otra que llega a final de mes muy justa. El famoso Estado del Bienestar hace aguas por todas partes”, avisa Xulio César Iglesias, director de la asociación Amencer.

En el barrio de A Inmaculada hay 79 familias –unas 200 personas en total– que recibirán alimentos, juguetes y ropa para pasar mejor estas fechas. “Hay más demanda que en la pandemia y en otras situaciones. Surgieron nuevos perfiles, incluyendo personas que nunca habían pedido ayuda”, asegura Alfredo Diéguez, el párroco.

“El perfil es variado, desde personas que viven solas hasta familias de siete miembros. Hay varias realidades”

Las 18 Cáritas parroquiales de Ourense son las beneficiarias de la Operación Quilo. Un informe de la trabajadora social del Concello, de la ONG de la Iglesia o del sistema sanitario, así como el certificado de empadronamiento, son los requisitos con los que las distintas parroquias comprueban el estado de vulnerabilidad y de necesidad de las personas que acuden a pedir ayuda.

“El perfil es variado, desde personas que viven solas hasta familias de siete miembros. Hay varias realidades”, subraya el sacerdote.

“La subida de las hipotecas impactó mucho, y también el precio de los alimentos y la precariedad laboral. A veces sientes impotencia, porque te gustaría ayudar mucho más”

Estas campañas de ayuda alivian, pero en su opinión la solución “debería ser más estructural”, en un contexto en el que el incremento del coste de la vida ha asestado un golpe duro en muchos hogares.

“La subida de las hipotecas impactó mucho, y también el precio de los alimentos y la precariedad laboral. A veces sientes impotencia, porque te gustaría ayudar mucho más”, comparte el párroco de A Inmaculada.

“La ayuda que nos llega de las instituciones ha bajado, es un contraste con que hayan aumentado las peticiones y la necesidad”

En O Vinteún, unas 140 familias –el perfil mayoritario, una pareja con uno o dos hijos– serán beneficiarias de la Operación Quilo de Amencer. “Es una cifra un 10 o un 15% superior”, dice el párroco de Santa Teresita, Aquilino Rodríguez. En el barrio se ha notado una mayor demanda de ayudas por parte de migrantes que, o bien no han encontrado trabajo, o bien lo tienen pero su situación es precaria. “La ayuda que nos llega de las instituciones ha bajado, es un contraste con que hayan aumentado las peticiones y la necesidad”, señala.

1.232 voluntarios de Amencer

La Operación Quilo aporta a las 18 Cáritas parroquiales productos de primera necesidad, y también juguetes para la Navidad, a un total de 1.285 familias formadas por 3.408 personas. Además de alimentos, prendas y juguetes, la acción solidaria ha recaudado 9.485 euros, que se invirtieron íntegramente en la compra de comida.

El voluntariado es el gran motor de Amencer. En esta campaña han participado 419 jóvenes y 813 adultos, desde mediados de noviembre hasta estas alturas de diciembre.

“Dedicando horas de vida, tratamos de sembrar solidaridad”

Colaboraron con la iniciativa el centro comercial Ponte Vella, 16 empresas que aportaron alimentos, 166 comercios en los que se instalaron huchas, 38 peluquerías que invitaron a la clientela a donar 2 euros por servicio, 53 puntos de recogida de alimentos y 22 supermercados donde instalaron 26 carros. “Dedicando horas de vida, tratamos de sembrar solidaridad”, resume Iglesias.

Los moteros solidarios ponen su grano de arena

La entidad ‘Solidaridad Motera’ ha entregado juguetes para las casas de acogida de Ourense, en especial para la entidad Valores CS, que cuenta con mas de 50 niños. “Es nuestro granito de arena para ayudar a los Reyes Magos a hacer felices a estos niños”, señalan.

Además, realizaron otra entrega para los niños de Senegal. La campaña se realiza por noveno año consecutivo.

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