El detenido por el crimen de Tirán, acusado de asesinato y robo con violencia

Balbino S.E., de 62 años, se enfrenta a dos duras acusaciones como único sospechoso del crimen que el 3 de julio de 2021 conmocionó a la parroquia de Tirán, cuando apareció muerta en su casa la vecina Cándida Soaje, de 72 años. Después de dos años de instrucción, que se retrasó al cambiar, el único detenido y acusado, de abogado, por fin se han presentado los escritos de acusación y se ha dado traslado a las partes. Tanto la acusación particular como la Fiscalía imputan a Balbino S.E. un delito de asesinato y otro de robo con violencia en casa habitada en grado de tentativa.

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El Juzgado de Instrucción número 1 de Cangas, que tramita el caso, se encuentra ahora pendiente de recibir el escrito de la defensa antes de fijar una fecha para el juicio. Desde pocas horas después de que apareciese el cuerpo de Cándida Soaje el sospechoso se encuentra en prisión provisional a la espera de juicio. Su defensa trató, sin éxito, de lograr la libertad provisional solicitando pruebas de ADN de la escena del crimen.

La víctima fue encontrada sin vida y con evidentes síntomas de violencia, por parte de su hijo y un vecino que, al encontrarse la puerta de la casa –ubicada en el barrio de Vilela junto a la carretera general PO-551– recurrieron a una pata de cabra para forzar una ventana lateral. Entonces vieron a la víctima maniatada y con daños graves en el cuello forzado contra el pasamanos de la escalera.

Pocas horas después, la madrugada siguiente, agentes de la Guardia Civil irrumpieron en una casa cercana, en la que residía Balbino S.E. Llegaron a su nombre tras haber realizado preguntas en distintas zonas del municipio, como en las viviendas abandonadas de la parte baja de la Finca Pazó, en el barrio de Quintela, en donde era habitual la presencia de toxicómanos.

Tras el registro, Balbino S.E. fue ingresado en prisión provisional después de pasar a disposición judicial a las 72 horas de su detención. En las primeras fases de la investigación también se interrogó a un segundo sospechoso, aunque finalmente las fuerzas de seguridad se inclinan por que el vecino de Tirán habría cometido el presunto crimen de Cándida Soaje en solitario.

Alarma social

Su primera declaración fue ante el Juzgado número 1 de Cangas. Había pasado 72 horas en los calabozos de la comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra. El titular del juzgado decretó su entrada en prisión provisional aludiendo a la “alarma social” que causaría su liberación, pese a que su defensa entendía entonces que no existían todavía “pruebas concluyentes” de su autoría.

Como adelantó FARO a finales de agosto, el acusado será juzgado con la participación de un jurado popular, aunque todavía no se ha fijado la fecha para la sesión.

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