El Frigoríficos se lame las heridas

Más tranquilo después de un viaje y una noche complicada, pero todavía con la cabeza en el duelo ante el Atlético Valladolid, saldado con el empate más doloroso que uno pueda concebir en balonmano. Así se muestra Nacho Moyano, que reconoce que continúa “dándole vueltas a lo que pasó. Fue una conjunción de astros para que sucediese eso”, señala, en referencia al hecho de perder una renta de tres goles en los últimos 47 segundos de partido. “Ellos arriesgaron porque no les quedaba otra, y salimos perdiendo en el duelo entre Camino y Toth. Nos equivocamos ante su defensa abierta y en lugar de hacer pases decidimos hacer uno contra uno con bote, con el riesgo de perder la pelota”, afirma.

Con todo, el técnico destaca el gran partido de los suyos, y sobre todo del central húngaro, hasta ese momento. “Creo que es el mejor partido que hemos hecho fuera de casa desde que estoy aquí. Recuerdo una victoria amplia en Cuenca, pero con un David Iglesias que las metía de todos los colores. Aquí ha sido por juego colectivo”, señala. Moyano sorprendió con una atípica defensa, fruto de las circunstancias –ausencia de Fodorean, Essam y Del Arco– pero también de un plan de partido. “Entendíamos que en el uno contra uno entre Lima y Quintas ganaría Lima, así que pusimos ahí a Santi, pero nos hacía falta otro en su lugar, y probamos con Mario, que ya está acostumbrado a hacerlo en los entrenamientos”, manifiesta.

El Frigoríficos de Morrazo busca el respaldo de la historia

La apuesta salió bien, al igual que la del ataque de siete contra seis, al que el Cangas sacó notables réditos gracias a la gran dirección de juego de Toth. “Teníamos claro que después de ver el partido ante el Torrelavega nos iban a plantear en algún momento esa defensa. Cuando no estábamos contentos con las acciones del seis para seis apostamos por el siete para seis, ya en el primer periodo”, comenta el preparador. Encima, la efectividad del Cangas, sobre todo en el primer tiempo, fue máxima. “Elegimos muy bien los lanzamientos, todos eran en situaciones claras . Tiró todo el mundo y muchas veces. Cuando llega el balón tantas veces a la segunda línea es porque haces las cosas bien, en mi modo de entender el balonmano”, afirma el madrileño.

Moyano también destaca el que, a diferencia de duelos anteriores, el miércoles el equipo supo sobreponerse en dos ocasiones a sus malos momentos, y que, a pesar de los elevados guarismos “no defendimos mal y Elcio paró, pero se jugó a un ritmo tremendo. La verdad es que salió todo lo que trabajamos durante la semana”. La mejor noticia es cerrar el año fuera del descenso directo y alcanzar el parón, “que será muy necesario para poder resetear las cabezas”.

Elcio y Jorge jugaron con roturas de fibras

Las condiciones en las que el Cangas afrontó el partido ante el Atlético Valladolid fueron aún más complicadas de lo que se conocía en un principio. Y es que el club mantuvo en secreto que tanto Jorge Pérez como Elcio Carvalho disputaron el choque a pesar de estar lesionados, con sendas roturas de fibras. El caboverdiano convive con esa lesión desde antes del duelo ante el Barcelona, lo que no le ha impedido completar grandes partidos ante Torrelavega y los vallisoletanos. El exmeta del Logroño, por su parte, ni siquiera pudo participar en la sesión del martes y únicamente salió en los siete metros, deteniendo uno de ellos.

Del Arco pasará por quirófano

Juan del Arco estuvo en el banquillo a pesar de tener un menisco roto. Por el momento se desconoce si su lesión de rodilla tiene afectación a los ligamentos, pero deberá pasar por quirófano. Fodorean, por su parte, recibió el alta para viajar a tierras castellanas, aunque sin el punto de forma adecuado para poder competir. Además del lesionado de duración Manu Pérez, Moyano tampoco pudo disponer de Essam, que se lesionó en un tobillo y que ya fue descartado en el calentamiento. Y Brais jugó tras una gastroenteritis que le hizo perder cinco kilos.

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