La familia de los cérvidos crece en Sálvora
Singladura en el paraíso entre crías de ciervos, gaviotas y delfines
El cervatillo escondido entre la maleza de Sálvora. / Cruceros del Ulla / Turimares
Ya se dijo en ocasiones anteriores que la isla de Sálvora dispone de una población de ciervos que contribuye a engrandecer el atractivo de este espacio protegido y declarado Bien de Interés Cultural (BIC) situado en la boca de la ría de Arousa.
Ahora puede añadirse que, si bien no son fáciles de ver, ya que tienen espacio suficiente para esconderse cuando llegan los turistas, ha sido posible comprobar que la familia cérvida sigue creciendo.
Así lo confirman desde Cruceros del Ulla Turimares, una empresa de pasaje asentada en O Grove que organiza excursiones periódicas a este paraíso natural, tanto de día, para disfrutar del paisaje, la flora, la fauna y la vieja aldea de Sálvora, como al atardecer, para observar la puesta de sol al lado del faro y participar en sesiones starlight en las que sorprenderse con las perseidas y otras muchas estrellas, cometas y planetas que se dejan ver aprovechando la inexistente contaminación lumínica de este lugar.
El gabato fue fotografiado cuando trataba de esconderse entre la maleza. / Cruceros del Ulla
Desde la naviera aportan una fotografía en la que se observa un cervatillo tratando de camuflarse entre la maleza, en una zona próxima al sendero que avanza desde el puerto hacia la aldea.
El gabato comparte protagonismo con las crías de gaviota que en esta época del año pueblan este territorio insular del Parque Nacional de la Islas Atlánticas de Galicia.
Los pollos de gaviota son abundantes en esta época del año. / M. Méndez
El mismo en el que, cabe recordar, también pueden verse conejos, chotacabras, caballos, pardelas, ratoneros, alcatraces, cormoranes, infinidad de paseriformes y un largo etcétera de especies animales y vegetales.
Una hembra de arroaz y su cría nadando al lado del "Fly Delfín". / Cruceros del Ulla
Un enclave natural privilegiado en el que también se dan cita los mamíferos marinos, siendo frecuente que expediciones como las que organiza Cruceros del Ulla en catamaranes como el “Fly Delfín” se hagan acompañar de delfines mulares que nadan y juegan con las olas cerca de la embarcación, para deleite de los pasajeros.
Manuel Méndez
Y hay que decir que también en este caso se ha observado entre esos arroaces a alguna que otra cría, lo cual es sinónimo de la riqueza que atesoran el archipiélago de Sálvora, de 248 hectáreas terrestres y 2.309 hectáreas marinas, y las aguas de la ría de Arousa.
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