Los gestores del Parque Nacional Islas Atlánticas de Galicia hacen balance de visitas, con 456.255 registradas el año pasado. Entre ellas 5.779 cursadas a la isla vilagarciana de Cortegada y 13.925 contabilizadas en Sálvora, la isla que preside la boca de la ría de Arousa.
En lo referido al territorio insular vilagarciano, que en 2020 había recibido 4.065 visitantes, hay que hablar de un tímido despertar, ya que si bien se ha experimentado una leve mejoría, todavía están muy lejos aquellas 10.477 visitas alcanzadas en el año previo a la pandemia.
No cabe duda de que se trata de la isla más castigada por el virus, a tenor de las cifras manejadas, pues queda claro que los visitantes del año pasado fueron la mitad de los registrados en 2019, convirtiéndose así en el territorio que más pierde.
Mejor parecen haber ido las cosas en Sálvora, sobre todo gracias al aumento de visitas en catamarán organizadas desde Ribeira y O Grove para ofrecer a arousanos y turistas la posibilidad de disfrutar de los paseos por esta misteriosa isla, las visitas a su aldea, las puestas de sol al lado del faro o las veladas de observación de perseidas.
En este caso hay que hablar de 13.925 visitantes el año pasado, lo cual supone, prácticamente, igualar los registros de antes de la pandemia, toda vez que 2019 se había cerrado con 14.908.
Lo que está claro es que se mejoraron, con creces, los registros del año del confinamiento, ya que en 2020 el número de visitas se quedó en 10.183.