Las mariscadoras de Carril, más cerca del cese de actividad

Las mariscadoras llevan varios días limpiando la ingente cantidad de algas de la Compostela.

Las mariscadoras llevan varios días limpiando la ingente cantidad de algas de la Compostela. / M. López

M. López

Después de siete meses sin trabajar, las mariscadoras de Carril empiezan a ver una pequeña luz al final del túnel. La Xunta Xeral de la cofradía ha acordado trasladar a la Consellería do Mar la petición del colectivo de adaptar su plan de explotación (cerrando las zonas de producción debido a la mortandad de molusco). Se trata del primer paso necesario para poder solicitar el cese de actividad por causa de fuerza mayor ante el Instituto Social de la Marina (ISM).

Una vez el pósito carrilexo envíe la petición a Mar, será el departamento que dirige Rosa Quintana el que decida si el plan de trabajo de las mariscadoras se modifica o no. En caso afirmativo, también deberá determinar durante cuánto tiempo se prohibirá la extracción en las autorizaciones de la agrupación.

En un principio, el colectivo había acordado en asamblea solicitar un parón de un año, de marzo de 2021 a marzo de 2022, pero debido al retraso de los acontecimientos esa fecha deberá variar. El presidente de la agrupación, Rolando Vidal, calcula que la adaptación del plan debería comenzar en junio.

Sin trabajar desde octubre

En la práctica, las mariscadoras llevan sin trabajar desde octubre debido a la mortandad de almeja y berberecho. En ese primer intento no lograron que la cofradía trasladase a Mar su petición (un trámite imprescindible para realizar cualquier tipo de cambio en la hoja de ruta de las mariscadoras).

Después se produjo una riada en febrero y la situación empeoró, pues la baja salinidad arrasó por completo Os Lombos do Ulla (la principal zona de producción de la agrupación).

Las mariscadoras volvieron a llevar a la Xunta Xeral de la cofradía el asunto, quedando su debate pospuesto, a la espera del resultado del informe de un biólogo externo que el pósito iba a contratar.

Según Rolando Vidal, en la reunión del martes por la noche, representantes de la cofradía explicaron que no fue posible conseguir ningún profesional que elaborase el dictamen a tiempo, por lo que se sometió a votación el traslado a Mar de la adaptación del plan de explotación. La petición fue aprobada por mayoría. “Claro que estamos contentos porque es un primer paso, y a ver si se soluciona de una vez todo este embrollo”, dice el presidente de la agrupación.

Invasión de algas

Otro de los frentes que tienen abierto las mariscadoras de Carril es la enorme acumulación de algas en la playa de Compostela, donde cuentan con una zona de extracción. Las mujeres y hombres que conforman el colectivo llevan varios días limpiando la zona, ayudados de maquinaria del Concello y también con sus propias manos.

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