Stellantis aviva la competencia entre Vigo y Marruecos, a la que califica como una de sus “fábricas insignia”

Adelanta a julio el fin de las obras de la expansión en Kénitra, en la que fabricará este año sus primeros vehículos

El aumento de capacidad para producir los “microcoches” eléctricos, previsto para octubre

Las obras de ampliación en Stellantis Kénitra, principal competidor de la planta de Vigo

Las obras de ampliación en Stellantis Kénitra, principal competidor de la planta de Vigo / Stellantis

Adrián Amoedo

Adrián Amoedo

La factoría viguesa del proveedor Denso perdió el contrato para proveer los climatizadores del futuro Peugeot e-2008 que se fabricará en la nueva plataforma industrial de Stellantis Vigo, la STLA Small. La noticia, publicada en exclusiva por FARO, supone un impacto todavía por calcular en la propia planta del fabricante nipón, pero, sobre todo, esconde una dura realidad que se viene dando en los últimos años en la automoción. La deriva de las centrales de compra de las grandes marcas hacia los países low-cost como los de Europa del Este, China o África merma la competencia de las empresas asentadas en Europa, incluidas las de Vigo, que ya de por sí tienen que luchar con la competencia de Portugal. Y Stellantis es una de las que más tira de eso. Los climatizados de Denso se harán, con toda probabilidad, en una empresa china en Marruecos, país en el que la multinacional que dirige Carlos Tavares tiene a una de sus “fábricas insignia”, cuya expansión acelera avivando, de paso, la competencia con Balaídos.

La planta marroquí de Kénitra se anunció en 2015 por parte de, entonces, PSA Group. La producción comenzó en 2019 y pronto creció hasta convertirse en la principal fábrica de todo el continente africano.

En la búsqueda por consolidarse como una referencia en la región Oriente Medio y África (MEA, en inglés), Stellantis anunció en noviembre de 2022 una inversión de en torno a 300 millones de euros para duplicar la capacidad de producción de la fábrica. Con ello, la previsión era la de llegar a una capacidad de producción de 400.000 coches y 72.000 microcoches eléctricos al año. A ello se le sumó la implantación de la plataforma Smart car, pensada para países emergentes, y la creación de 2.000 puestos de trabajo.

Ahora, el director de Operaciones de la región MEA, Samir Charfan, sacó pecho del “progreso” realizado en la localidad marroquí situada a escasos 50 kilómetros al norte de Rabat. Las obras, dijo, van viento en popa y su finalización se adelanta al próximo julio. “Anticipamos la producción de los primeros vehículos en la nueva planta a finales de año”, explicó en un vídeo realizado por Stellantis para evaluar los casi diez años desde el desembarco del grupo en el país.

Además de compartir las primeras imágenes de las obras de la ampliación, Cherfan también hizo una valoración de lo que supone Kénitra a nivel del grupo. Según dijo, “es una de las instalaciones de mayor rendimiento del grupo a nivel mundial”, una de sus “fábricas insignia”, ya que “constantemente” se sitúa en el ranking de las diez mejores factorías de la empresa “en todas las categorías”. “Principalmente en costes de transformación, utilización de la capacidad y consumo de energía”, puntualizó.

“Esta expansión representa una gran inversión en las operaciones marroquís de Stellantis y subraya el compromiso de la compañía con la región”, añadió.

Obras en el interior de la planta de Stellantis en Kénitra, Marruecos

Obras en el interior de la planta de Stellantis en Kénitra, Marruecos / Stellantis

Stellantis Kénitra produce el Peugeot 208 y los microcoches eléctricos Citroën Ami, Fiat Topolino y Opel Rocks-e. Sobre la producción de estos últimos, Cherfan concretó que el aumento de capacidad hasta las 72.000 unidades se completa en octubre.

El propio Tavares dijo en su visita a Vigo el pasado diciembre que las plantas del grupo en el Magreb (Kénitra y Tafraoui, en Argelia) y de Turquía son la principal competencia interna de Balaídos. Una competencia que, en ambos casos, no para de crecer gracias a las inversiones de Stellantis, que por otro lado no acaba de confirmar la STLA Small para Vigo a la espera del Perte VEC.

El grupo llama a los proveedores para que se asienten también en Argelia

Marruecos es el principal polo de automoción de África gracias a Renault y Stellantis. A su lado, se han ido implantando toda una nube de proveedores que, gracias a los bajos costes, encuentran una forma de proveer a los fabricantes locales y de Europa. Solo al lado del a planta de Kénitra están nombres de multinacionales bien conocidas de Vigo y su área como Lear, Magna, Gestamp, Faurecia o Citic Dicastal, el fabricante chino de llantas que sondeó Galicia para una planta que finalmente acabará en Portugal.

Stellantis cree que esta es la fórmula adecuada e intenta crear otro hub en el país vecino, Argelia. A finales del año pasado, el grupo inauguró la planta de Tafraoui, en la que ensambla los Fiat 500 y las Fiat Doblò viguesas, enviadas despiezadas desde Balaídos, como adelantó este medio. En abril, celebró allí una convención de dos días con más de 90 proveedores de todo el mundo para tentarlos a invertir en el país africano y acompañarles en su aventura allí.

“Tuvieron la oportunidad de conocer los beneficios e incentivos que ofrecen las autoridades argelinas a los inversores extranjeros a través de una presentación de un representante de la Promoción de Inversiones de Argelia. Agencia (AAPI)”, informó Stellantis. Al acto asistió el ministro de Industria y Producción Farmacéutica argelino, Ali Aoun.

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