Las caries son el principal problema dental y el más frecuente en niños. Por eso las chuches y los refrescos son el eterno tema de debate.
Y de ahí que intentemos resolver la mayor cantidad de dudas posible con la inestimable colaboración del doctor Óscar Castro Reino, presidente del Consejo General de Dentistas de España.
Y comienza dejando claro el problema que suponen las caries:
- "Esta patología no solamente es la más prevalente de la esfera bucodental, sino que es una de las enfermedades más frecuentes de la infancia. Se calcula que, en nuestro país, cerca de 2 millones de menores de 6 años tienen caries, la inmensa mayoría, sin tratar”.
La caries de la primera infancia están muy relacionadas con la alimentación y una mala higiene bucal.
- Un consumo frecuente de azúcares refinados y alimentos ultraprocesados multiplican las posibilidades de desarrollar caries.
¿Cómo afectan las golosinas a los dientes de nuestros hijos?
En este tema, el doctor Castro es tajante: “afectan de manera extraordinaria, al igual que las bebidas azucaradas, popularmente conocidas como refrescos"
- “El consumo de azúcar altera los niveles de bacterias presentes en la boca, las cuales convierten el azúcar en ácido, desmineralizando el esmalte de los dientes.
- Los episodios repetidos de ingesta de azúcar durante todo el día aumentan la frecuencia de los ataques ácidos y el riesgo de desarrollar caries dental”.
Entonces, ¿debo prohibir las chuches?
Desde la Sociedad Española de Odontopediatria (SEOP), aconsejan “evitar toda fuente de azúcares refinados durante los dos primeros años de vida, cuando el niño es más propenso de establecer un proceso virulento de caries”.
- Además, no solo hay que evitar las golosinas, sino también los azúcares ocultos, aquellos presentes en la leche con chocolate, galletas, ganchitos, pan de molde…
Es esencial llevar una dieta equilibrada, no solo para evitar caries, sino también casos de obesidad infantil.
Sin embargo, es cierto que en estos casos hay que utilizar el sentido común. Tampoco se trata de prohibir de forma tajante las chuches, sino más bien controlar su consumo y no ceder ante todos los caprichos del niño.
Consejos para minimizar el riesgo de caries
Como ya hemos indicado, las golosinas y el azúcar nunca deben formar parte de la dieta habitual de los niños, sino que deben utilizarse como algo puntual para ocasiones muy excepcionales.
Sin embargo, en el caso de que las consuman hay formas de rebajar el riesgo de caries. Tal y como indica el doctor Oscar Castro:
- “Evitar los episodios repetidos de ingesta de azúcar durante el día, sobre todo entre comidas.
- Si toman azúcar, que sea durante la comida, intercalando con otros alimentos. Los snacks salados como las patatas fritas también contienen hidratos de carbono complejos, que se convierten en azúcares.
- Prestar especial atención a los bebés. Bajo ningún concepto endulzar la leche ni mojar el chupete en miel o azúcar.
- Cepillar los dientes inmediatamente después. Si son bebés, pasar una gasa húmeda.”
Una buena alimentación para unos dientes sanos
Inculcar a nuestros hijos unos hábitos de vida saludable es beneficioso en todos los aspectos.
El consumo excesivo de azúcar se relaciona con el sobrepeso y obesidad, los cuales son factores de riesgo importantes para las enfermedades cardiovasculares y la diabetes, entre otros.
Además, tener una buena alimentación juega un papel fundamental en el desarrollo y mantenimiento de unos dientes fuertes y sanos.
Desde SEOP nos indican los nutrientes esenciales para tener una buena salud dental:
- Proteínas. La desnutrición se relaciona con la aparición de caries.
- Calcio. Necesario para tener dientes fuertes y resistentes.
- Fósforo para una correcta estructura de los huesos y dientes.
- Vitamina A. Un déficit de esta vitamina aumenta las posibilidades de caries.
- Vitamina K. Evita el sangrado de las encías.
- Vitamina C. Mantiene fuerte el tejido de las encías.
- Riboflavina. La falta de este nutriente puede provocar inflamación de la lengua.
Todos estos nutrientes los podemos encontrar en:
- Productos lácteos
- Arroz integral
- Hortalizas de hojas verdes como la espinaca o el brócoli
- Carne y pescado
- Huevos
- Legumbres
- Almendras
- Aceites vegetales
- Algunas frutas, como el arándano azul.
En definitiva, ingredientes de una dieta sana y equilibrada.
