El pleno rechaza la compatibilidad de la policía que quiere arbitrar en la Liga F

El caso de Iris Romero, la policía local que pidió una excedencia para poder arbitrar en Primera División, ha sido una de las órdenes del día de ayer del pleno convocado por el ejecutivo local. Tuvo lugar en el Teatro Principal de Pontevedra, con público, la votación del expediente de incompatibilidad. Ésta ganó por mayoría (9 a favor frente abstención de 15). Los dos informes negativos emitidos por los servicios técnicos del Concello fueron, en palabras de la nacionalista Eva Villaverde, “contundentes y claros” acerca de la incompatibilidad de mantener el cargo en la Policía Local con otra actividad privada.

A esos informes de incompatibilidad del mes de junio se refirió la bancada popular, que reprochó al ejecutivo no haber propuesto la resolución de denegarlo. Tanto PSOE como BNG aprobaron una modificación en la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) el pasado año que acabó por establecer que ningún miembro de la policía local podría desarrollar un oficio privado a la vez que mantener su cargo público.

En el caso de Romero sería con la Real Federación Española de Fútbol, institución deportiva donde la policía va a trabajar, y lo hará pidiendo una excedencia para poder continuar manteniendo el cargo. “Votamos abstención”, indicó Manuel Fariña, “pidiendo que contéis con nuestra colaboración con todo el cariño”. Se trata de la mayor categoría para una jueza de línea en fútbol, ejercer de árbitra asistente en la Liga F. “Una RPT no debería ser más restrictiva que la propia normativa”, indicaron desde la bancada socialista. El PSOE mostró su voluntad de conceder la compatibilidad, sin embargo se abstuvieron en la votación.

Lo mismo ocurrió con el grupo popular local, quien habló de “política de imposición”, pues según la concejala Pepa Pardo ya van cinco recursos interpuestos a esta RPT. Villaverde constestó que ellos mismos votaban abstención porque “con el cuerpo normativo de este momento no es posible aprobar una compatibilidad. Ustedes pueden darse el lujo de abstenese”. En julio, cuando intentaron dar solución al caso Iris Romero, “se buscó una solución a través de un grupo de juristas”.

Interrupciones en el Pleno

Un grupo de siete funcionarios del cuerpo municipal de Policía (seis hombres y una mujer) acudieron en representación de la junta de personal del Concello al Pleno Extraordinario. En repetidas ocasiones interrumpieron la sesión. “Un respeto para el concejal que está hablando “, pidió Lores en varias ocasiones a lo largo del pleno, pues los funcionarios vocearon durante las intervenciones.

Se mostraron favorables a la postura de Pepa Pardo, quien verbalizó su apoyo a Iris Romero a pesar de que su grupo se abstuvo durante la votación. “Que dejen de encabezar las manifestaciones del 8M y que se pongan a trabajar por la igualdad”, dijo la edil popular a la nacionalista Eva Villaverde en un momento de su intervención.

Desde el grupo popular, indicó, continuarán trabajando para que algo así “no vuelva a ocurrir y para que Iris pueda seguir siendo ejemplo para todas las mujeres que quieren dedicarse al fútbol profesional. Una mujer no avanza en su carrera profesional porque se introdujo una RPT que no se lo permite”. Villaverde contestó que se está “judicializando la política municipal”.

El grupo de policías llegó a hablar de forma directa al alcalde a la salida: ”Esto es a mala fe”, afirmaban tras vocear durante los turnos de los concejales.“Los que hablan son los concejales que se presentaron a las elecciones para representar a las distintas fuerzas políticas y el público debe mantener un respeto, más ún si son funcionarios”, quiso aclarar el alcalde.

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