Un año (más) esperando por la ejecución de la variante norte de Ourense

“Es un punto de inflexión”, dijo la ex Secretaria de Estado, Isabel Pardo de Vera, el pasado 16 de septiembre de 2022 sobre el inicio de las obras de la variante norte de Ourense, que había adjudicado el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana en marzo de 2022.

Más de 370 días después de aquel simbólico acto de colocación de la “primera piedra”, solo queda eso, la primera piedra y las intenciones. Hechos, como diría Castelao, no hay ninguno y por lo que se ve tampoco se le esperan. Una de las obras más importantes para la conectividad con la ciudad y también con ese futuro enlace para la autovía con Lugo sigue parado sin cambios significativos. En el terreno donde supuestamente se deberían ejecutar las obras, hay un descampado desbrozado, un cartel que anuncia la película de La Sirenita y otros dos que anuncian el proyecto del Gobierno central. Nada más.

Las obras que se deberían acometer son las del primer tramo de 1,7 km de longitud, entre el actual enlace de la autovía de las Rías Baixas en Eirasvedras, donde actualmente existen dos carreteras separadas por dos carriles por sentido en la N-120.

El, por aquel entonces, delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, enfatizó en el “trabajo y esfuerzo” que supuso la adjudicación del proyecto después de 25 años sumando partidas y quedándose en un cajón por gobiernos populares y también socialistas. Destacó el “impulso” en infraestructuras del Gobierno de Sánchez, pero el “trabajo” y el “impulso”, en cuanto a la variante norte, solamente son palabras doce meses después del acto “inaugural”.

Desde el Ministerio de Transportes arguyen que están “a la espera de informes para la reposición de los servicios” y según pudo saber FARO uno de ellos es el plan para desviar el tráfico en dicha carretera nacional, que se verá afectada.

Reacciones

El PSOE de la ciudad de Ourense explica que “es una obra clave para el futuro de la ciudad y después de tantos años parecía que veíamos la luz, pero vamos a seguir insistiendo donde corresponda para agilizar estas obras, que cambiarán una de las principales entradas de la ciudad y también será el paso previo del bulevar termal”.

Para el diputado popular, Celso Delgado, esta situación “es escandalosa y es una expresión de la desidia del Ministerio de Transportes. Ya se cumplieron 14 meses desde junio de 2022 cuando formalmente se iniciaron las obras del primer tramo, pero a punto de terminar agosto de 2023, por lo menos de forma visual no se aprecian avances sobre el terreno”.

Y añade que “el Gobierno de Sánchez debe una explicación a los ourensanos y ourensanas sobre esta inejecución de las obras que van a suponer, aparte de la demora que ya están consumidos 14 de los 30 meses de plazo, otra cuestión y es que van a quedar sin gastar los 8,9 millones de euros consignados en los Presupuestos Generales del 2023”.

Desde el BNG dicen que “lo cierto es que una vez más vemos como PP y PSOE miran para otro lado o actúan beligerantemente, pero en función de si están en el Gobierno o en la oposición. Los retrasos de esta infraestructura son injustificables y de hecho ya en el año 2009, en el Senado, preguntábamos a respeto de su ejecución”.

Y finalizan comentando que “las obras que se deberían estar ejecutando lejos de avanzar, se ralentizan sin que tampoco veamos avances en la licitación de los otros tramos restantes. Seguiremos insistiendo y reivindicando la ejecución de la infraestructura en todas las administraciones, porque estamos delante de un proyecto clave para el desarrollo y la movilidad de la ciudad pero también de la provincia”.

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