El campus ultima la planta piloto de industrias alimentarias más completa del noroeste español

Es una demanda histórica de la Facultad de Ciencias | Con 270 m2 y equipos de vanguardia estará dedicada a docencia e investigación de procesos de productos cárnicos y pesqueros, lácteos, vegetales, panadería, vino y cerveza

Gonzalo Astray, Javier Rodríguez Rajo, Ricardo Bendaña, Lucas González, Sidonia Martínez y Ángela Fernández.   | // Fernando Casanova

Gonzalo Astray, Javier Rodríguez Rajo, Ricardo Bendaña, Lucas González, Sidonia Martínez y Ángela Fernández. | // Fernando Casanova / S. DE LA FUENTE

El área de Tecnología de los Alimentos de la Facultad de Ciencias de Ourense ultima los preparativos para poner en marcha la nueva planta piloto de industrias alimentarias instalada en la zona de ampliación del edificio del Campus Auga, a la que también se trasladará la sede del Centro de Apoio Científico-Tecnolóxico á Investigación, CACTI, que actualmente se encuentra en el Parque Tecnológico de Galicia, en San Cibrao. Cada dotación ocupará una de las dos plantas construidas en los soportales del inmueble, una obra que suma 630 m2 más de superficie, pendiente todavía de inauguración.

Mientras llega la fecha de apertura, la Facultad de Ciencias se prepara para dar un salto cualitativo en su trabajo docente e investigador. La planta piloto es una demanda histórica del centro, que se remonta a los primeros años de su creación, señala el decano, Javier Rodríguez Rajo. “Estamos muy ilusionados porque somos la única Facultad de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de España que no tiene planta piloto, que es una infraestructura imprescindible. Es como si una ingeniería industrial de coches no tuviese un taller para montar piezas. Pues estamos trabajando así”, señala.

A pesar de esta carencia, la Facultad de Ciencias ha logrado situar a la Universidad de Vigo entre las 70 mejores del mundo en el campo de las ciencias de la alimentación y entre las 500 primeras en ciencias agrícolas y ciencias ambientales en el ranking de Shanghái. “Ha supuesto muchísimo esfuerzo para los profesores porque hemos tenido que suplir las carencias estructurales con más horas de trabajo y más dedicación”, apunta Rodríguez Rajo.

En marcha en febrero

La previsión del centro es ponerla en funcionamiento en febrero, coincidiendo con el inicio del segundo cuatrimestre. Una vez en marcha será la planta piloto de industrias alimentarias más grande y completa del noroeste español, con 270 m2 de superficie y equipamiento de última generación para desarrollar procesos. “Trabajaremos con seis líneas de productos: cárnicos y pesqueros, lácteos, vegetales, panadería, vinos y cervezas”, detalla Sidonia Martínez, profesora e investigadora del área de Tecnología de los Alimentos. El decano apunta que ninguna otra planta del entorno trabaja con tantas líneas de productos.

En cuanto al equipamiento, cuenta con un texturómetro de última generación y cuatro cámaras, una de refrigeración, otra de congelación y dos de maduración, entre otros. “Lo más importante”, apunta el decano, “es que vamos a poder trabajar con muchas líneas de productos y el alumnado podrá hacer trabajos de fin de grado y fin de máster aplicados a estas líneas”.

De hecho, recalca Sidonia Martínez, la docencia se verá muy beneficiada con esta planta, ya que se podrán hacer prácticas. “Es cierto que está más orientada a Ciencia y Tecnología de los Alimentos, pero los grados en Ingeniería Agraria y Ciencias Ambientales también le podrán sacar partido”, apunta la docente, en referencia, por ejemplo, al tratamiento de los residuos que generan las industrias alimentarias.

Nuevo equipamiento en el edificio del Campus Auga.

Nuevo equipamiento en el edificio del Campus Auga. / FERNANDO CASANOVA

Clave para el futuro Instituto de Agroecología y Alimentación

A nivel de investigación esta planta será una “herramienta básica” para el Instituto de Agroecología y Alimentación que impulsa la UVigo y que tendrá su sede el edificio del Campus Auga. El reto de este centro, actualmente en fase de tramitación, es aplicar I+D+i para convertir a Galicia en un referente europeo en la transición hacia sistemas agroalimentarios más resilientes, sostenibles, seguros y circulares. “El objetivo es llegar a ser un instituto internacional, por lo que disponer de esta planta es fundamental”, destaca el decano.

Abierto a las empresas

Aunque la docencia y la investigación tendrán prioridad, el centro está trabajando en la elaboración de protocolos para que las empresas del entorno también puedan usar esta planta. “Queremos abrir la universidad al tejido empresarial y que las empresas que no tienen departamento de investigación la puedan utilizar también”.

El personal técnico y docente ultima los preparativos y la puesta a punto del equipamiento. Este lunes, Javier Rodríguez y Sidonia Martínez revisaron la línea de procesado de productos cárnicos acompañados por el docente Gonzalo Astray, del departamento de Química Física y la alumna de Ciencia y Tecnología de los Alimentos Ángela Fernández, además de personal de la empresa de equipamientos industriales y del director del CACTI, Ricardo Bendaña.

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