Vigo concentra más demandantes de vivienda protegida que el resto de urbes gallegas juntas

Son casi 7.000, unas 450 más que hace seis meses

Suponen el 70% de las peticiones de la provincia y el 40% de las autonómicas

Siete de cada 10 optan por el arrendamiento

El Plan Xeral y Navia son las grandes esperanzas

Vista general de la ciudad.

Vista general de la ciudad. / Marta G. Brea

Ya son casi 7.000 personas que están a la cola para entrar en una vivienda de promoción pública en Vigo en cualquiera de sus diferentes modalidades. Lo revelan los datos del Rexistro Único de Demandantes de Galicia, que crece a diario: son 451 más que hace algo menos de seis meses. La cifra transparenta una realidad preocupante en la ciudad más poblada de la comunidad: los precios de los alquileres y compraventa de casas y pisos están disparados, contratiempo que se suman a las subidas de los tipos de interés, el encarecimiento de la financiación y la inflación. El resultado: la gente busca un techo más accesible.

Si comparamos la cifra de Vigo con la del resto de las ciudades gallegas, nos damos cuenta de que la situación es realmente alarmante. Los 6.961 demandantes en la urbe olívica son más que la suma del resto de grandes municipios. Con datos actualizados ayer, A Coruña reúne 2.438 peticiones; Pontevedra, 1.148; Lugo, 982 Santiago de Compostela, 967; Ourense, 539; y Ferrol, 452. Y la diferencia aumenta con el paso del tiempo: en nuestro municipio, evoluciona más rápido la cantidad, que supone casi un 70% del dato a nivel provincial (10.182 demandantes) y cerca del 40% a nivel autonómico (18.012 solicitantes en Galicia).

Basta con acercar la lupa a la cifra de Vigo para observar que la gran mayoría de los interesados en acceder a hogares más asequibles lo quieren hacer a través de un contrato de alquiler, ya sea con o sin opción de compra: 5.106 de los 6.961, esto es, más del 73%. La modalidad que genera más interés, y con mucha diferencia, es la vivienda de protección oficial de promoción pública –la promueve una entidad pública–: reúne 5.175 peticiones. Esta coyuntura responde al precio elevado de los arrendamientos. Según Idealista, el portal web con más anuncios, la renta media en diciembre alcanzó los 9,4 euros por metro cuadrado.

Las otras cuatro cobran bastante menos protagonismo. Se registran 515 solicitudes para vivienda de promoción pública de núcleos rurales y cascos históricos, 244 para vivienda de promoción privada de régimen especial, 524 para vivienda de promoción privada de régimen general; y 503 para vivienda de promoción privada de régimen concertado. En estas opciones, a diferencia de la vivienda de protección oficial de promoción pública, destaca la inclinación hacia la compra: 1.327 demandas sobre 1.786 en total, es decir, más de 74% de los interesados en estas alternativas esperan por un contrato de compraventa.

Este conjunto de cifras esconde realidades angustiantes. Acceder a una vivienda en alquiler o comprarla es, para una gran parte de la población, una quimera que siempre se queda en las cartas a Papá Noel y los Reyes Magos. Según Idealista, Vigo despidió 2023 con un precio medio del metro cuadrado de 9,4 euros en diciembre, el mismo que en noviembre y octubre y muy similar al del resto de meses: 9,3 en febrero, mayo, agosto y septiembre; 9,4 en junio y julio; 9,5 en marzo y abril, máximos históricos; y 9,2 en enero. El precio de compraventa, 2.098 euros por metro cuadrado de media en diciembre –Idealista–, no baja de los 2.000 desde hace dos años y es el más elevado desde noviembre de 2012.

A corto plazo, no parece que vaya a mejorar la situación vista la tendencia. Alquilar un piso de 100 metros cuadrados en Vigo es ahora 250 euros al mes más caro que hace 10 años de media. Y, para comprarlo, hay que desembolsarse casi 210.000 euros de media, unos 36.000 más que ocho años atrás. Son dos comparaciones que resumen el estado crítico por el que transita el sector de la vivienda en la ciudad olívica, donde la oferta es escasa tanto en arrendamiento como en compraventa a la espera de que se entre en vigor el nuevo Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), hito que se prevé alcanzar, por fin, este año.

El nuevo planeamiento dispondrá suelo para la construcción de casi 51.500 viviendas, de las que cerca de 14.400 se prevé que estén sometidas a algún tipo de protección. Expertos en materia inmobiliaria y la concejala de Urbanismo, María José Caride, vaticinan que el aumento de la oferta y la exigencia a todos los ámbitos de nueva urbanización o reforma interior del 30% de vivienda protegida contribuirán a reducir los precios de arrendamiento y compraventa. Se contempla este mismo efecto a raíz del futuro desarrollo de pisos y casas en San Paio de Navia –en torno a 1.600 de protección–, que comenzará este año, según avanzó el mes pasado el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda.

La revisión del PXOM trae bajo el brazo la ejecución de cinco ámbitos de suelo dedicados íntegramente a la construcción de viviendas protegidas. En Santa Cristina-parque central de servicios, más de 200; Guixar, más de 600; Santa Cristina-Severino Cobas, más de 710; Cantabria-Ramón Nieto, más de 700; y el ofimático –entorno de la avenida de Madrid–, más de 1.600. El documento El documento revisado fue validado provisionalmente a finales de diciembre por el pleno del Concello con los votos a favor del grupo socialista, la abstención del PP y el rechazo del BNG. Este paso imposibilita la caducidad del Instrumento de Ordenación Provisional (IOP), que permite la construcción de viviendas unifamiliares y edificios residenciales sin depender del Plan Xeral de 1993, obsoleto, y sus modificaciones.

En este momento, el Concello tiene lanzados dos proyectos para la promoción municipal de viviendas en alquiler. Uno de ellos se ejecutará en Barreiro: una edificación dotacional y 40 pisos de protección pública de tres habitaciones en la parcela sobre la que, antaño, se levantaba el cuartel militar, derribado hace más de dos decenios. El otro se hará realidad en Esturáns: un bloque de nueve plantas con 27 viviendas de una y dos habitaciones, 39 plazas de aparcamiento y trasteros.

La ejecución de pisos y casas sociales en Vigo es una asignatura pendiente de las administraciones públicas. Entre enero y septiembre de 2023, según las cifras del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, solo hubo 12 transacciones de este tipo de propiedades de un total de 1.606 operaciones.

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El Instituto Galego da Vivenda e Solo (IGVS) elaboró un estudio pormenorizado que concluye que el alquiler podría limitarse en 15 barrios de Vigo porque cumplen las condiciones que marca la nueva ley de vivienda para establecerlos como zonas tensionadas. Se encuentran en Oia, parte de Coruxo y de Candeán, Navia, zonas de Valladares, el centro, Lavadores, Bembrive, Cabral y Teis. En todo caso, la concejala de Urbanismo, María José Caride, avanzó en octubre que el Concello no contempla pedir a la Xunta la declaración de zonas tensionadas. Apuesta por facilitar el acceso a un hogar con la limitación de nuevos pisos turísticos y más vivienda social.

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