Casi 3,5 de cada 10 euros que ingresan los vigueses se destinan a gastos de vivienda

A la subida de precios generalizada, se suma una losa que cae encima de los residentes a finales o primeros de mes: el pago del alquiler o la hipoteca. En Vigo, según los datos recabados por la consultora inmobiliaria Atlas Real Estate Analytics, los inquilinos dedican a la vivienda, de media, más de un 32,4% de la renta familiar anual, un 34,7% si se tienen en cuenta los gastos y suministros. Son cifras superiores a la recomendada, no más del 30%, que se dispara en más de media decena de códigos postales del municipio olívico: el 36208 –Alcabre, Bouzas y el entorno de la Praza da Industria–, con casi un 37%, donde residen más de 15.000 vecinos; el 36330 –ámbito de Coruxo–, con un 41,61%; o el 36392 –Saiáns, con viviendas a pie de playa–, con más de un 92%.

El alquiler alcanza su máximo histórico en Vigo: se dispara a 9,5 euros el metro cuadrado

Los vecinos que menos cantidad dedican de sus ingresos a hacer frente a los gastos de la vivienda son los del código postal 36312 –zona de Beade y cercanías del Hospital Álvaro Cunqueiro–, casi un 17,5%. La renta del hogar se eleva a 38.225 euros y el coste medio del arrendamiento es de 520 euros al mes, 556 si se añaden gastos y suministros. Les siguen en la clasificación los del 36315 –Valladares, entorno del monte Alba, Estrado do Freixo y Chandebrito–, sobre un 17,6%. Acoge a unos 2.700 habitantes con una renta media de la unidad familiar de 36.500 euros. El precio medio del alquiler está en 500 euros al mes, número que avanza hasta los 535 euros con gastos y suministros. Son los dos únicos casos en los que el porcentaje no llega al 20%.

En el otro lado de la balanza, está el código postal 36390 –entorno de Canido, Cabo Estai y San Miguel de Oia–, con un precio medio del alquiler de 4.000 euros –4.280 con gastos y suministros– y renta media cercana a los 39.000 euros: destinan más de un 132%. Con cifras no tan altas, aparecen el 36392 –zona de Saiáns– con más de un 92%, el arrendamiento medio en 2.800 euros –3.000 con gastos y suministros– e ingresos familiares que superan los 39.000 euros; el 36330 –ámbito de Coruxo–, con un 41,61% y un precio medio del alquiler de 1.200 euros –1.280 con gastos y suministros–; y el 36208 –Alcabre, Bouzas y el entorno de la Praza da Industria–, con casi un 37%, arrendamiento a 950 euros –1.020 euros con gastos y suministros– y una renta media por hogar de 33.242 euros.

Las ocho áreas tensionadas de alquiler en Vigo acogen a casi 100.000 habitantes

A raíz de los porcentajes medios que se derivan de los datos publicados por Atlas Real Estate Analytics, se deduce que todo el ayuntamiento vigués podría considerarse área tensionada según la Ley por el Derecho a la Vivienda –la primera ley de vivienda de la democracia–, aprobada recientemente en el Congreso de los Diputados tras un año de negociaciones. Si se tienen en cuenta los códigos postales por separado, como publicó FARO, hay 93.224 habitantes que residen en alguna de estas áreas, que se establecen como tal si la evolución del precio de la zona –ya sea de arrendamiento o compra– ha superado en al menos tres puntos el IPC (Índice de Precios de Consumo) de los últimos cinco años o el desembolso medio de la hipoteca o el alquiler más los gastos y suministros supera el 30% de la renta media de los inquilinos de la zona.

La nueva norma recoge este apartado para delimitar bolsas de pisos y casas en los que se podrá imponer un tope a los alquileres –en máximos históricos en Vigo: 9,5 euros el metro cuadrado de media en el mes de abril, el último dato que ofrece el portal inmobiliario Idealista– más allá de las limitaciones generales que la normativa también prevé para el conjunto. En la urbe olívica, según los datos que ofrece la consultora inmobiliaria Atlas Real Estate Analytics, hay ocho códigos postales –de 27 en total– que encajan en uno u otro de los supuestos indicados –en ningún caso se dan los dos a la vez–. La renta media general de los ciudadanos de Vigo es de 35.060 euros anuales y el precio medio del alquiler asciende a más de 1.000 euros al mes, según la consultora inmobiliaria Atlas Real Estate Analytics.

La ley de vivienda, una de las medidas estrella de la legislatura que se alcanza tras el acuerdo del Gobierno con ERC y EH Bildu, fija un tope del 3% a las subidas del alquiler en 2024, amplía las consideradas como zonas tensionadas y se reduce la cantidad de pisos que puede tener un propietario para considerarlo gran tenedor. Además, incrementa los porcentajes de reserva de suelo para vivienda protegida del 30% al 40% en el suelo urbanizable.

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