4 claves para atender al alumnado con necesidades

“Intentamos alejarnos de la etiqueta de Aula Especial porque hace que los estudiantes se sientan diferentes”

ALUMNOS  Y PADRES ENTRANDO EN EL COLEGIO.

ALUMNOS Y PADRES ENTRANDO EN EL COLEGIO. / Marta G. Brea

C. M.

Los centros concertados están priorizando la atención más específica a aquello escolares que afrontan al aprendizaje pero desde un centro ordinario. Tanto es así que desde la Xefatura Territorial de Educación se aprobó en su última reunión la autorización de una decena de aulas de Educación Especial en un total de diez centros de Vigo, Nigrán y también Pontevedra.

Así, la Consellería de Educación autorizaba al CPR Montecastelo a impartir una unidad o aula de educación especial, contando su composición actual con tres grupos de Educación Infantil, seis de Educación Primaria, cuatro de ESO, otras cuatro de Bachillerato y una a mayores de Educación Especial.

El Aula de Superpoderes de Escuelas Nieto.

El Aula de Superpoderes de Escuelas Nieto. / Cedida

Pero ¿cómo se puede adaptar un centro ordinario a los estudiantes con necesidades educativas especiales?

Desde el principio intentamos alejarnos de la etiqueta de Aula de Educación Especial” explica Rodrigo Martínez, el director de Escuelas Nieto. “Hacía que los niños y niñas que la utilizan se sintieran distintos. Y es que se trata, más bien, de un Aula de Integración. La mayoría de centros ordinarios disponemos de un espacio para ello, con un pedagogo encargado de atender a los niños que tienen algún tipo de necesidad, ya sea enmarcada en algún tipo de trastorno o no, e integrarlos a todos en igualdad de condiciones”.

Con esa premisa en mente, en Escuelas Nieto decidieron dar un paso más allá y convertir el Aula de Integración en un lugar donde dar rienda suelta a sus poderes.

"Ellos están en sus clases de referencia y van allí cuando lo necesitan"

Ellos están en sus clases de referencia y van allí cuando lo necesitan, cuando hay algún trabajo extraordinario o buscan apoyo a nivel lenguaje, matemáticas... de lo que sea” continúa Rodrigo Martínez.

Mucha gente cree que adaptar una clase es bajar la dificultad, hacerlas más fáciles, pero se trata de medidas de adaptación no curriculares. Es decir, no se cambia el contenido ni el temario, sino que se adapta el método de enseñanza.

La disposición

Estos métodos pueden ser muy concretos, como la disposición de las preguntas en los exámenes o la situación del alumno en la clase: “Se distrae con facilidad, por lo que no deberíamos dejar que se siente atrás, ya que al estar más lejos perderá el interés y se pondrá a charlar con sus compañeros. Tampoco cerca de la ventana ¡hay de todo para observar!” explica Estela Portillo (ANHIDA) que aclara, además, que muchos de estos sistemas son beneficiosos para el alumnado en general.

Rol de asistente

Uno más específico es la figura del Asistente o el Secretario del profesor: “Lo ideal es permitir movimientos no disruptivos. No podemos impedir que se muevan, así que nos toca intentar que esos movimientos no alteren el ritmo de la clase. Ahí es donde nace la figura del ‘alumno secretario’. El maestro le pide tareas: ‘Ve a buscar esto”, “Lleva esto al despacho del director”. Este tipo de actividades les permiten disfrutar y sentirse autónomos, saber que están ayudando.

En las excursiones

Hablamos de darles autonomía, pero también de hacerles sentir bien: “La dificultad de participar en algunas actividades les hace mucho mal para su amor propio”. Por eso es tan importante hacerles sentir partícipes y normales. “Por ejemplo en las excursiones. Lidiar con la clase entera es complicado, y cuando le sumamos una necesidad especial (que muchas veces está acompañado de más problemas) los profesores pueden verse desbordados. Por eso se recomienda llevar un acompañante (un padre, un tutor) a la excursión, que pueda ayudar de forma orgánica, sin hacer sentir mal al alumno, y ayude al profesor”.

El aula

El mobiliario del aula es particular. Tiene una parte con hierba artificial y espacios naturales, con distintos murales y zonas diferenciadas según el uso:_una canasta para jugar, un puf para sentarse a descansar e incluso una pequeña casita para meterse dentro cuando quieres estar solo. “Los superpoderes surgen por ese motivo, porque no es un aula convencional. Es un aula para hacer todo tipo de actividades más allá de las clases.”

Este curso, además, ponen en funcionamiento un correo, donde cada alumno puede hacer sugerencias, hablar de sus inquietudes o simplemente encontrar a alguien que le escuche (“Bueno, en este caso, que te lea” ríe Elíseo).