O Galiñeiro se defiende de eólicos y minas

Los comuneros de Vincios solicitan su declaración como Espazo Protexido de Interese Natural (EPIN) ante la Xunta para evitar proyectos industriales

El macizo rocoso de O Galiñeiro que los comuneros quieren convertir en EPIN.

El macizo rocoso de O Galiñeiro que los comuneros quieren convertir en EPIN. / Marta G. Brea

En sus entrañas guarda uno de los mayores depósitos de tierras raras de Europa, materiales claves para la fabricación de móviles, tabletas, leds, turbinas eólicas, baterías, coches eléctricos... O Galiñeiro es uno de los dos únicos yacimientos de oro tecnológico existentes en España, con potencial para extraer casi 3.000 toneladas al año, según datos del Colegio Oficial de Geólogos de Galicia. Hace doce años que una multinacional con sede en Sudáfrica solicitó permiso sondear la viabilidad de instalar allí una mina al aire libre. El proyecto acabó en un cajón ante la presión social, pero no son pocas las voces que inisten en la necesidad de explorar ese potencial para rebajar la dependencia de China, líder mundial en la extracción.

La Plataforma pola Protección da Serra do Galiñeiro, integrada por 43 colectivos, logró echar abajo también hace apenas tres años el último proyecto eólico planteado para la montaña situada entre Gondomar y Vigo. No hay más sobre la mesa, pero “temos que estar preparados ante calquera ameaza”, asegura Alberto Covelo, presidente de la comunidad de montes de Vincios, propietaria del emblemático monte. Son pocas las armas de las que disponen, explica, para dar la batalla si es necesario.

La Xunta tiene dos años de plazo para pronunciarse sobre la protección

Pese a sus valores paisajísticos, ambientales y culturales, el monte que corona la parroquia gondomareña carece de protección urbanística y ambiental suficiente y los comuneros acaban de solicitar a la Xunta que declare Espazo Privado de Interese Natural (EPIN) su macizo rocoso, un total de 138,23 hectáreas. Se trata de una figura que blindará la cima ante cualquier proyecto industrial y “establecerá un marco xurídico e legal co que garantir e regular a xestión e a conservación do espazo, así como sancionar calquera neglixencia cometida dentro das súas fronteiras”, señala Covelo. Solo hay otros dos EPIN en toda Galicia: las Sobreiras do Faro, en Oia, y las Fragas e Brañas do Alto do Gaiteiro, en el municipio coruñés de Mesía.

Alberto Covelo y Marta González, con el proyecto presentado para declarar EPIN O Galiñeiro.

Alberto Covelo y Marta González, con el proyecto presentado para declarar EPIN O Galiñeiro. / Alba Villar

Para justificar la necesidad de convertir el Monte Galiñeiro en EPIN, la entidad ha encargado un estudio a Víctor Echevarría Bastos y Marta González González, ingenieros de Medio Natural y Energía, respectivamente, que han peinado el terreno para poner en valor los principales aspectos a conservar del Monte Galiñeiro.

Valores a conservar

Alberto Covelo y Marta González, con el proyecto presentado. |    // ALBA VILLAR

Una flor de "succisa pinnatifida lange", detectada en O Galiñeiro. | // ALBA VILLAR / /

La flora aportan interés al entorno porque el 26% de sus especies inventariadas están en peligro de extinción. Entre ellas, los investigadores han localizado succisa pinnatifida lenge, un planta de la que solo existen cuatro colonias y 1.500 ejemplares en Galicia.

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Garranos en O Galiñeiro. / Cedida

La fauna de O Galiñeiro también es diversa y singular. Allí habitan dos aves rapaces en peligro de extinción, el halcón pequeño y el lagartero común. Cientos de caballos salvajes viven también en el entorno, así como numerosos anfibios. Los expertos recomiendan ampliar la investigación para catalogar las especies existentes con el fin de disponer de información más detallada.

Fauna. En O Galiñeiro habitan dos aves en peligro de extinción: el halcón pequeño y el lagartero común, además de decenas de caballos salvajes. | V.E.B

La Cova da Becha. | V.E.B / /

La “excepcional riqueza xeolóxica” del espacio es uno de los valores que ambos expertos destacan. Dispone de lugares de interés geológico como la Pedra da Estrada que muestra cómo se pudo ir configurando el paisaje a lo largo de los milenios, restos de la última época glacial hace 50.000 años, los llamados Pedroghullos, así como cuevas asociadas a la acción del agua. Entre ellas, la llamada Cova da Becha, singular por su morfología y por la leyenda que sitúa una serpiente en su interior que acababa con la vida de cientos de ovejas e incluso la identificaba con la Coca de Redondela, que habría abandonado el lugar espantada por los vecinos y habría sido acogida en la villa de los viaductos.

Geológicos. La Cova da Becha –en la imagen–  es singular por su formación y por la leyenda le atribuye el origen de la Coca de Redondela. | V..B.

Un manantial. / Cedida

La importancia hidrológica de O Galiñeiro reside, indican, en que sus manantiales y recogidas naturales de pluviales forman los ríos Zamáns y Louro y abastecen tres traídas vecinales: Chaín, Galiñeiro y A Fraga.

Hidrológicos. Manantiales como el de la fotografía forman los ríos Zamáns y Louro y riegan tres redes vecinales de suministro de agua. | V.E.B.

El castillo de O Galiñeiro, recientemente excavado. / Jose Lores

Además de referencia paisajística, el Monte Galiñeiro alberga tesoros patrimoniales materiales como el castillo recientemente excavado o inmateriales como leyendas alrededor de su territorio, subraya el trabajo.

Tras entrevistarse con comuneros, montañeros, ganaderos, cazadores y usuarios de traídas, los autores del informe hablaron con expertos en geología, arqueología, biología y espeleología. Realizaron visitas de campo antes de redactar la memoria que la asamblea de comunidad de montes aprobó el 31 de enero. Ahora solo queda esperar que la Xunta emita su veredicto. Tiene dos años de plazo.

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