Era una realidad en la práctica desde mediados de marzo, pero la falta de confirmación oficial creaba un halo de suspense, o al menos de extrañeza, en parte de la afición y del entorno celeste. Fin al asunto: Luís Campos será el arquitecto del nuevo proyecto del Celta y se afana ya en el diseño de la plantilla, en la que se espera un cambio profundo.

Desde A Sede se emitió esta mañana un brevísimo comunicado en el que se informa de que el portugués "lleva meses trabajando en el club como asesor externo del área deportiva junto a Juan Carlos Calero (Albacete, 1976) en papel de coordinador del primer equipo". El Celta solo añade que "la voluntad de ambas partes es que la relación se extienda en el tiempo por muchos años más".

Campos (Esposende, 1964) compartirá sus tareas en el Celta con las que realizará para el PSG, de acuerdo con un modelo de dirección deportiva externalizada poco habitual en el mundo del fútbol. Tiene ante sí la tarea de acometer una fuerte remodelación de la plantilla, en la que se espera con contar con 10 caras nuevas para suplir salidas, en distintas circunstancias, como las de Nolito, Santi Mina, Orbelín Pineda, José Fontán o, en principio, de dos titularísimos como buen cartel.

La primera piedra que ha colocado el asesor externo ha sido la contratación, por algo menos de cinco millones, del sueco Williot Swedberg, un jugador de su perfil: un talento joven y desconocido en las grandes ligas del que se espera que pueda explotar en Vigo.