El Celta cierra con Swedberg su primer fichaje de la temporada

Williot Swedberg, la perla del Hammarby, se convertirá en el primer fichaje del Celta para la temporada 2022-23. El club celeste ha dado el visto bueno a la contratación del centrocampista sueco, de 18 años, cuyo fichaje es una apuesta personal de Luis Campos.

Swedberg se comprometerá con el Celta por las cinco próximas temporadas, hasta junio de 2027. El traspaso se ha concretado en 50 millones de coronas suecas (4,7 millones de euros).

El acuerdo está cerrado, pendiente apenas de que el jugador viaje la ciudad para cumplir con el preceptivo trámite del reconocimiento médico. La entidad que preside Carlos Mouriño no ha confirmado si el Hammarby conserva un porcentaje sobre un futuro traspaso del jugador, tal como señala el tabloide sueco Expresen. El fichaje se hará oficial en los próximos días.

Tal como adelantó este diario, Swedberg se inclinó por aceptar la oferta del Celta frente a la del FC Brujas, el club con el que el equipo celeste pugnaba por hacerse con sus servicios. El futbolista, que a principios de junio visitó las instalaciones de ambos clubes, ha preferido jugar en LaLiga y ha elegido hacerlo de la mano de Luis Campos en un equipo del que tiene excelentes referencias por reciente paso de su compatriota John Guidetti. El futbolista es también admirador de Jospeh Aidoo, a quien conoció durante el paso del defensa ghanés por el Hammarby hace unos años.

El Celta tiene depositadas grandes expectativas en la incorporación de la nueva joya del fútbol escandinavo, aunque no espera de él un gran rendimiento inmediato debido a su juventud y falta de experiencia en LaLiga. Swedberg necesitará un periodo de adaptación, pero el club tiene una confianza juega en el ojo clínico de Luis Campos para descubrir nuevos talentos y generar plusvalías. El fichaje también convence a Eduardo Coudet, que ha obtenido buenas referencias del jugador y que valora que hable español, lo que a va facilitar su adaptación.

Pese a que se considera una apuesta ganadora, el fichaje de Swedberg generó al club algunas dudas, no tanto por que se desconfiase de su capacidad para ofrecer un buen rendimiento en una competición tan exigente como LaLiga, sino porque podría restarle minutos a Gabri Veiga, la joven estrella emergente de la cantera, con quien comparte posición. El Celta no fichará más futbolistas de este perfil para reforzar su medio campo.

Williot Swedberg (Estocolmo, 2004) comenzó a llamar la atención en la Allsveskan la pasada temporada con el Hammarby, pero ha sido en el inicio del presente curso en el que ha verdaderamente despuntado en la máxima categoría del fútbol sueco al anotar cinco goles en los diez primeros compromisos ligueros del presente curso.

Internacional sub 21 con Suecia, se trata de un espigado futbolista de muy buena condición técnicaque llega al gol con facilidad desde segunda línea y destaca por su versatilidad, pues puede desempeñarse en diversas posiciones del medio campo y la zona ofensiva, desde el pivote a la delantera pasando por la media punta y la banda izquierda.

Se complica la venta de Renato Tapia

La eliminación de Perú en la tanda de penaltis de la repesca frustra el sueño de Renato Tapia de representar a su país en el Mundial de Catar y supone un nuevo contratiempo para los planes de venta que el Celta, que confiaba en que la condición de mundialista del centrocampista elevase su cotización de mercado e incrementase sus posibilidades de salir traspasado este verano por buena cantidad.

Tapia era una de las opciones preferidas por el Celta para hacer caja y obtener liquidez para financiar la decena de contrataciones que el club prevé realizar para reforzar el plantel. Tras quedarse fuera del Mundial, el Celta es consciente de que le va a resultar mucho más complicada su venta porque el protagonismo del jugador en el Celta ha declinado de modo sensible con respecto a la temporada anterior.

El internacional peruano no costó un céntimo a las arcas del club, con lo su venta generaría una importante plusvalía. El jugador, sin embargo, ha perdido en un año la mitad de su valor de mercado después de haberlo multiplicado por cinco en la temporada precedente. La suplencia de la pasada temporada le ha pasado factura y la reciente eliminación de Perú en la repesca supone otro duro contratiempo.

Renato Tapia llegó al Celta libre en el verano de 2020 tras concluir su contrato con el Feyenoord, equipo con le que se labró una solida reputación en los Países Bajos. Su valor de mercado cuando fichó por el equipo celeste era de 4 millones. En un solo año se multiplicó por 5, hasta un precio máximo de 20 millones debido al gran rendimiento ofrecido en su primera temporada en LaLiga, de la que fue uno de los futbolistas revelación. Fue entonces cuando perdió la oportunidad de venderlo por un buen pellizco. En esa primera campaña en Balaídos, Tapia lo jugó absolutamente todo, pero el pasado curso su situación en el equipo cambió de forma radical.

El exceso de partidos con la selección le impidió realizar la pretemporada y, aunque acortó sus vacaciones, el cansancio y la concatenación de lesiones comenzaron a pasarle una elevada factura. El bajón físico del pivote limeño coincidió con el creciente protagonismo de Fran Beltrán, que le arrebató la titularidad, relegándolo a un segundo plano. Con Perú, el céltico ha conservado su jerarquía, pero sin el escaparate del Mundial su fichaje resulta menos atractivo.

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