¿Estornudas cuando ves luz brillante? Esta es la razón

Aunque normalmente estornudamos cuando algo nos provoca alergia o tenemos un cuerpo extraño que nos provoca cosquilleo en las fosas nasales, hay un 35% de la población que no puede evitar hacerlo cuando, simplemente, mira algo con luz brillante de frente.

Se trata del llamado "estornudo fótico". Basta con mirar una luz de gran potencia, como la solar, o un destello después de pasar un tiempo a oscuras para estornudar. Esta característica fue estudiada en 2010 por un grupo de científicos de la Universidad de Berkeley que hallaron que el estornudo por luz se produce por varias alteraciones genéticas. De hecho, una de ellas se sitúa cerca del gen asociado con los ataques epilépticos, por lo que se sospecha que podría haber una conexión biológica entre los dos síndromes.

Un palmo de narices: mitos y realidades del estornudo

Aunque hay pocos estudios, se le ha puesto nombre. Se trata del Autosomal Dominant Compelling Helioopthalmic Outburst Syndrome (ACHOO), en español el "síndrome autosómico dominante de irrupción helio-oftálmica compulsiva". Este se caracteriza por estornudos incontrolables que responden a la exposición a una luz como la solar y se sabe que afecta a una de cada cuatro personas. En el ámbito clínico se detecta pidiendo al individuo que mire a una luz brillante. Según el National Institutes of Health (NIH), todavía no se ha descubierto la base genética de este síndrome, pero si uno de los dos padres se ve afectado por el síndrome, su hijo tiene un 50% de posibilidades de heredarlo.

Con todo, no es una característica preocupante. Únicamente puede volverse molesto, sobre todo en verano o primavera. Para las personas que sufren el síndrome ACHOO es recomendable utilizar gafas de sol cuando van conduciendo ya que podrían sentir ganas incontrolables de estornudar en situaciones como la salida de un túnel.