Conservas Cerqueira, punta de lanza del sector mar-industria gallego

Una inversión de 28 millones de euros, una plantilla que, en un par de años, puede llegar a los 250 trabajadores, y una superficie ocupada de 18.000 metros cuadrados, en una parcela de más de 36.000. Así se presenta la nueva etapa de la viguesa Conservas Cerqueira en el Ayuntamiento de Rianxo.

Son solo algunos de los llamativos datos que rodean la inauguración oficial, ayer, de la megafactoría arousana de esta firma nacida en Vigo en el año 1890 y desde entonces convertida en una de las 20 principales conserveras de España, con un volumen de producción que supera los 40 millones de latas anuales.

Sustituye a la planta de Ribeira

Su nueva factoría, que llega para sustituir a la que tenía en Ribeira, está “dotada de la más moderna tecnología en materia medioambiental y de sostenibilidad”, convirtiéndose no solo en la de mayores dimensiones de Conservas Cerqueira, sino también en “la más avanzada tecnológicamente y la más eficiente desde el punto de vista medioambiental”, ya que está dotada de novedosos “sistemas de tratamiento y reutilización de agua, de energías renovables y de aprovechamiento energético”.

Así se hace realidad la megafactoría de Conservas Cerqueira

Completamente “automatizada y sensorizada” por medio de “un sistema centralizado de gestión”, encendió su maquinaria en el polígono industrial de Té el pasado mes de junio.

Y lo hizo, como se decía entonces, para abanderar una especie de nueva “revolución industrial” de la industria gallega dedicada a la transformación de los productos del mar.

Conservas Cerqueira enciende máquinas

Prueba de ello es que, como se había anunciado hace meses, esta factoría enclavada en Arousa Norte (Barbanza) está “diseñada para superar el clásico concepto de ‘usar y tirar’ mediante un eficiente sistema de gestión de aguas y distintos dispositivos para lograr el máximo aprovechamiento energético”.

Así se levantó la megafactoría de la viguesa Conservas Cerqueira en Arousa

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Tratamiento del agua

Destaca el hecho de que dispone de cinco líneas de tratamiento para reutilizar el agua empleada en cada proceso de cocción, tratándola individualmente antes de reintegrarla en el sistema, “si cumple los estándares de calidad requeridos”.

De lo contrario, esas aguas sobrantes se dirigen a la Estación de Depuración de Aguas Residuales Industriales (Edari) con la que ha sido equipada esta planta.

Sus marcas

De este modo, con marcas como “Pay Pay”, “Ramona”, “Pay Pay Oro” y “Buenos Días”, la empresa que preside Juan Manuel Cerqueira Ozores da un paso decisivo con el que consolidarse en el mercado nacional e internacional.

Producir más y mejor

Así lo destacó el propio Cerqueira cuando quiso dejar constancia de que “estas magníficas instalaciones están pensadas no solo para producir más, sino también, mejor, con procesos productivos que respetuosos con el medio ambiente que persiguen la excelencia”.

Mira así a un futuro que “pasa necesariamente por la innovación y la sostenibilidad”, remarcó en presencia del el vicepresidente primero de la Xunta, Diego Calvo; del conselleiro de Mar, Alfonso Villares, y del alcalde de Rianxo, Julián Bustelo.

Beatriz Sestayo

Junto a ellos, una de las grandes artífices de la implantación de Conservas Cerqueira en el polígono rianxeiro, la gerente de Suelo Empresarial del Atlántico (SEA), Beatriz Sestayo.

La misma que ha conseguido agotar la superficie disponible en este polígono, que en cuatro años pasó del 20% al 100% de ocupación.

La ampliación del polígono industrial de Té está en el aire

Es decir, que colocó en el mercado los 317.728 metros cuadrados de que dispone este parque –como superficie bruta–, convirtiendo lo que antiguamente fue un inmenso y peligroso vertedero de basuras, en una especie de mina de oro en la que, junto a Cerqueira, operará pronto Conservas Rianxeira.

Y donde funcionan ya firmas como Cortizo, Transagonza, Mar da Pobra, Metales Taragoña, Proafer, Renobat, Grúas Orbutráns o Potel Torres.

Suelo industrial: La competencia que llega del otro lado de la ría

De ahí la “enorme satisfacción” mostrada ayer por Sestayo en el acto inaugural, tras el que destacó la apuesta de Cerqueira por potenciar “la tradicional actividad de las conserveras gallegas”, apostando, para ello, por “las nuevas tecnologías”.

Además de garantizar su “compromiso con el medio ambiente”.

No solo ella aplaudió el plan de expansión de la compañía viguesa y su fuerte inversión, que le permite “situarse a la vanguardia en sistemas de eficiencia energética y sostenibilidad”.

Delegado del Gobierno

También lo hizo el delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, quien además de destacar el trabajo realizado por SEA, quiso agradecer a Cerqueira “su apuesta por Galicia y la generación de empleo y riqueza; haciéndolo, además, con responsabilidad social y de forma respetuosa con el medio ambiente”.

De escombrera a motor económico para Galicia

Dicho lo cual, llegó a definir las flamantes instalaciones del polígono de Té como “las más modernas y punteras de España”, ya que combinan “investigación, desarrollo e innovación” al servicio de la propia empresa y del sector mar-industria.

Por cierto, que el delegado del Gobierno aprovechó para animar a las empresas gallegas a acogerse a las diferentes líneas de ayuda del Estado.

Una colaboración que les puede permitir afrontar acciones de descarbonización, digitalización, economía circular o cualquier otra que ayude a “hacer crecer las empresas, generar riqueza en el país y crear empleo de calidad”.

Las características de la empresa

• Conservas Cerqueira tiene más de 130 años de historia, lo que la convierte en una de las empresas más longevas del sector en España.
• Con sede social en Vigo, donde opera su otra gran factoría, comercializa las marcas "Pay Pay", "Ramona", "Pay Pay Oro" y "Buenos Días".
• Su producción anual supera los 40 millones de latas, con un volumen de ventas de más de 50 millones de euros.
• Es una de las 500 primeras empresas españolas, en términos generales, y está en el top 20 de las firmas conserveras del país.
• Sus productos se distribuyen tanto en mercados nacionales como internacionales, exportando sus conservas a países de los cinco continentes.

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