Vilanova pone en marcha el primer tramo de la senda a Monte Lobeira

Desde hace tiempo, el Concello de Vilanova se ha marcado como principal objetivo el desarrollo de sendas que recorran todo el término municipal. Esa apuesta se basa en el creciente interés que está despertando entre los visitantes el turismo de salud, que permite descubrir parajes desconocidos. Así nació el diseño de la senda entre los molinos de Currás y Monte Lobeira, una ruta que diseñó la doctora en Historia da Arte vilanovesa, Alicia Padín, y que ahora el Concello pone en marcha en su primera fase.

Esta primera fase se centra en el tramo entre Tarrío y Ousensa, de poco más de un kilómetro, y que se va a acometer siguiendo el curso del río Tarrío. Gonzalo Durán, alcalde de Vilanova, visitó ayer la zona para señalar que “hemos elegido este tramo de inicio porque nos parece el más necesario, ya que es una gran alternativa para que los peatones eviten la carretera provincial”. El regidor recordó que “la Diputación lleva años negándose a hacer unas aceras o una actuación que permita mejorar la seguridad en esa carretera, por eso creemos que este proyecto es importante, ya que permitirá a los vecinos del interior de Caleiro desplazarse hasta Currás andando o en bicicleta sin ningún peligro”.

El proyecto, que recorre todo el río Tarrío o Currás desde los molinos hasta Lobeira fue diseñado por la doctora en Historia da Arte vilanovesa Alicia Padín

La actuación va a ser inmediata, ya que los técnicos han estado realizando las mediciones en los últimos días. “Están preparando el proyecto de la senda, algo que nos pidieron un grupo de vecinos hace tres meses, que querían llegar a Tarrío con seguridad; será un vial de tres metros de ancho para ir en bicicleta o andando, un punto de unión entre distintos puntos de la parroquia de Caleiro”, explica Durán. La actuación va a ser financiada por la Consellería de Medio Ambiente que aporta 200.000 euros.

El proyecto de la senda parte desde los molinos de Currás, recuperados recientemente por el Concello y se encamina hacia Lobeira bordeando el río Tarrío , un camino por el que se va a descubrir toda la belleza de la Vilanova interior así como varios molinos que se encuentran abandonados.

Alguno de ellos es de titularidad municipal y podría ser rehabilitado una vez que se finalice la adaptación de la senda. En total serán siete kilómetros que atravesarán las parroquias de Caleiro y András, transcurriendo por pistas rurales y tramos de nueva apertura hasta llegar al mirador de la Cruz de Lobeira. En el futuro tampoco se descarta la construcción de un desvío hacia Tremoedo para continuar uniendo el interior de Vilanova de Arousa con sendas.

A lo largo del recorrido también está previsto instalar paneles explicativos con referencias a los monumentos más próximos, alguno de los cuales, como le lavadero de Ousensa, se han rehabilitado recientemente.

La puesta en marcha de este proyecto se viene a sumar a todas las iniciativas que se han desarrollado en la comarca en los últimos años, donde los concellos han realizado una apuesta decidida por el turismo de senderismo. Desde la Vía Verde de Vilagarcía a Portas por las antiguas vías del ferrocarril, hasta la Variante Espiritual del Camiño Portugués entre Pontevedra y Vilanova, la comarca se ha llenado de sendas y paseos peatonales.

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