El centro de Moaña se desplaza a O Rosal

El traslado de la concesionaria del agua profundiza en la apertura de la mayoría de servicios en la zona nueva de la villa

Las nuevas oficinas de Aqualia, abiertas esta semana en la calle As Barxas.

Las nuevas oficinas de Aqualia, abiertas esta semana en la calle As Barxas. / GONZALO NÚÑEZ

El traslado de Aqualia esta semana a la calle As Barxas es una muestra más de que el “ensanche” de O Rosal se está convirtiendo poco a poco en el nuevo centro urbano de Moaña. En las últimas dos décadas ha atraído cada vez más servicios públicos y esta tendencia irá a más en el futuro próximo, pues el nuevo centro de salud está en construcción en el barrio y el Concello plantea levantar al lado el futuro auditorio. En la zona densamente poblada de O Real resisten sobre todo el Juzgado de Paz y la oficina de Correos. Ramón Cabanillas, por su parte, sigue pagando la falta de aparcamiento.

La empresa concesionaria del ciclo del agua en Moaña, Aqualia, trasladó esta semana sus oficinas desde el barrio de O Real a la calle As Barxas, en O Rosal, al lado de donde opera el ORAL desde el año 2017 que se encarga de recaudar los impuestos de los moañeses. Son dos de las más recientes aperturas en la gran zona residencial que se construyó en la primera década de este siglo y que poco a poco aglutina los servicios públicos de los moañeses, en detrimento de otras zonas que antes presumían de ser el centro urbano.

La oficina de Correos, en la calle Méndez Núñez, es el gran servicio público que sigue en O Real.   | // G.N.

La oficina de Correos, en la calle Méndez Núñez, es el gran servicio público que sigue en O Real. / G.N.

El traslado de la Casa do Concello en 2003 a la propia calle As Barxas fue seguido de la apertura de la piscina en 2009 y del local de odontología y fisioterapia en 2011 que ampliaba la cartera de servicios sanitarios en la villa. El Concello abrió también en la parte alta de la zona residencial la Casa da Mocidade mientras los bajos comerciales se llenaban de negocios particulares.

Las zonas que fueron disminuyendo en peso en cuanto al número de servicios son el barrio de O Real y la céntrica calle Ramón Cabanillas. Este segundo caso vio mermado fuertemente el número de clientes que podían acudir a los negocios con la apertura del Corredor do Morrazo primero y de la autovía después. Esto llevó al cierre de muchas persianas de negocios.

El reformado Concello Vello todavía no aumenta los clientes en Ramón Cabanillas

Para intentar paliar el problema el Concello acometió una ambiciosa reforma de la antigua casa consistorial, convertida ahora en un aula de estudios, una sala de exposiciones y una sala de ensayos con cabina de grabación, además de mantener las dependencias de Protección Civil. La puesta en funcionamiento de este espacio, el pasado mes de octubre, ha dado vida a esta céntrica calle pero desde la asociación de comerciantes Acimo explican que, aunque el renovado inmueble “quedó muy bien” de momento no consigue atraer más clientela al comercio de esta calle. Los comerciantes entienden, desde hace años, que la falta de aparcamiento es el gran problema que sufre Ramón Cabanillas. Encontrar espacio para el estacionamiento ayudaría a volver a desarrollar esa zona.

El Juzgado de Paz resiste en O Real.   | // GONZALO NÚÑEZ

El Juzgado de Paz resiste en O Real. / GONZALO NÚÑEZ

En lo que respecta a O Real, en estos momentos solo quedan en el barrio dos servicios públicos esenciales. Uno es la oficina de Correos, que funciona en la avenida Méndez Núñez, y el otro es el Juzgado de Paz, que resiste en la calle Fragata Villa de Madrid, precisamente al lado de donde antes se ubicaba la concesionaria del abastecimiento, saneamiento y depuración de aguas.

Esta tendencia irá a más en los próximos años, pues en la zona de Sisalde, al lado de O Rosal, la Consellería de Sanidade está construyendo el nuevo centro de salud, que cerrará la actual Casa do Mar en la avenida Concepción Arenal.

En el mismo ámbito de Sisalde el Concello levantará un edificio con viviendas de alquiler social que en sus plantas bajas acogerá el futuro auditorio, una demandada instalación para acoger representaciones teatrales y eventos culturales en Moaña, lo que contribuirá a convertir O Rosal definitivamente en el centro de la vida moañesa.

La piscina, uno de los primeros servicios abiertos en la zona nueva.

La piscina, uno de los primeros servicios abiertos en la zona nueva. / Gonzalo Núñez

Solo la alameda, que acoge la Praza de Abastos, el mercadillo de los miércoles y los sábados y sobre todo los eventos que semana tras semana se celebran en la planta alta de la Praza consigue resistir y rivalizar con el último “ensanche” del casco urbano.

Descentralización

La iluminación navideña es reflejo de este traslado del centro neurálgico moañés, pues los Xardíns do Concello acogen desde hace años la mayor parte de la iluminación así como el festival del día del encendido.

Fuera de la zona urbana los principales servicios públicos que siguen “descentralizados” son la biblioteca y centro cultural de Quintela y la Escola de Música, que se ubica en la antigua rectoral de la parroquia original de San Martiño.

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