Los emigrantes retornados multados por Hacienda por no haber declarado sus pensiones en el extranjero han decidido volver a la carga. A pesar de que el Consejo de Ministros acordó retirar las sanciones a los pensionistas, el colectivo no se da por satisfecho porque denuncian que siguen "discriminados". En Santiago, Pontevedra y Vilagarcía cientos de jubilados que trabajaron en el extranjero salieron de nuevo a la calle para reclamar al Estado que les reintegre lo que les cobraron "de oficio" y que se cambie la ley tributaria que les obliga a hacer la declaración de la renta a partir de los 11.200 euros cuando para al resto de pensionistas el umbral es de 22.000 euros.

En Vilagarcía se reunieron un centenar de emigrantes que recorrieron las calles del concello, con una parada ante la sede del PP y hasta la delegación de Hacienda. También en Pontevedra terminaron delante de la Agencia Tributaria y en Santiago clamaron reclamando la devolución de "lo robado" por el Gobierno.