En los últimos tres días las cifras de contagios de coronavirus han comenzado a suavizarse en Galicia, pero, en consonancia con lo mostrado a lo largo de toda la pandemia, esa mejora tardará en reflejarse en el número de víctimas mortales. De hecho, en la última semana son varias las jornadas que arrojan datos tan negros como los de principios de abril. En las últimas 24 horas han fallecido otras 15 personas por Covid-19, elevando a 1.024 el total. En el anterior parte --con algunos óbitos correspondientes al fin de semana y no solo al lunes-- fueron 21, idéntica cifra que el 2 de noviembre. Solo el 11 de abril hubo más muertos, 23, infectados por el patógeno. Y mientras, la presión hospitalaria sigue su escalada, con 95 ingresados en las ucis de los hospitales gallegos. En ese marco de fondo, el comité clínico de la Xunta ha decidido, en una reunión finalizada a las 21:00, que se mantienen las restricciones decididas la semana pasada.
Después de que ayer el área de Vigo fuese la más castigada, con hasta cuatro fallecidos de la residencia de Salvaterra que ha sido denunciada por las condiciniones en las que sse atiende a los mayores, hoy el Serga sno ha comunicado ningún deceso aquí. Así pues, vuelve ser Ourense la que se lleva la peor parte. En concreto, otro geriátrico, el de Nosa Señora dos Miragres de Barbadás: perecieron tres de sus usuarias, de 88, 98 y 97 años, esta última después de que la trasladasen al CHUO. En el hospital falleció también un hombre de 78 años.
Grave es también la situación en el área de Ferrol, que había pasado la primera ola con menos afección que otras zonas de Galicia. En su complejo hospitalaio murió una mujer de 54 años y otra de 92, que procedía de la Residencia As Fragas-Pontedeume. También perdió la vida un hombre de 84 años en su domicilio de Fene.
Otra residencia en la que ha entrado el coronavirus es la de DomusVi-Ribadumia, que hoy cuenta con una usuaria fallecida. Es una mujer de 91 años que había ingresado en el Hospital do Salnés.
En el Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña murieron dos hombres, de 71 y 88 años, y una mujer de 66. Mientras, en Lugo también perdieron la vida tres personas: una usuaria de 94 años de la Vivenda Comunitaria Remanso de Paz da Fonsagrada que estaba en el HULA, otra de 83 que estaba en ese mismo centro hospitalario, y una de 84 que estaba en el Hospital da Mariña y que residía en el geiátrico de San Cibrao, en Cervo. Por último, en el CHUS falleció un varón de 72 años.
Casos activos
Galicia logra bajar de los 10.000 casos activos de covid-19. La comunidad encadena tres días de descenso en el total de personas infectadas por el virus y retrocede hasta el pasado viernes, cuando superó la simbólica y preocupante cifra. La curva empieza a caer, aunque tímidamente. Así lo apuntan los datos notificados esta mañana por el Sergas: los afectados caen a 9.952 (63 menos que ayer), y los nuevos contagios confirmados por PCR bajan a 350 (-45). Por otro lado, las altas se mantienen en torno al medio millar, 425 en concreto.
Estos buenos datos se acompañan de un mínimo incremento de las hospitalizaciones, solo cuatro en la última jornada. Tres personas ingresaron en planta, donde hay 514 pacientes, y uno en la UCI, donde ya son 95. Estas cifras están lejos de los picos alcanzados en la primera ola, con más de 900 enfermos internados y 178 en cuidados críticos.
Las severas restricciones en 60 concellos gallegos, principalmente en las siete ciudades y su entorno, parecen empezar a dar sus resultados. Desde el fin de semana se prohíben las reuniones de no convivientes y los desplazamientos fuera de las áreas delimitadas por Sanidade. Además, la Xunta decretó el cierre de la hostelería, que únicamente puede operar para el servicio a domicilio o recogida en el local de platos preparados. Estas limitaciones se extenderán hasta el próximo 4 de diciembre. Además, en el resto de Galicia se mantiene el toque de queda entre las 23 horas y las 6 de la mañana, y la restricción de grupos a un máximo de seis personas.
Hasta la fecha, el covid-19 ha afectado a 42.533 personas en nuestra comunidad, de las que 31.573 se han curado. Por su parte, las PCR realizadas han aumentado a 756.759, tras realizarse el lunes 4.343.
La presión hospitalaria al alza en Vigo, Pontevedra y Lugo
Las personas ingresadas con coronavirus suben en las áreas de Vigo, Lugo y Pontevedra. En concreto, en la primera aumentan a 20 los pacientes en la UCI (+2) y a 73 en planta (+6). Los casos activos han vuelto a descender, situándose en 2.455.
Por su parte, Pontevedra ha logrado reducir sus casos activos después de tres semanas de repunte, pero sus hospitales vuelven a sumar pacientes: ya son 80, de ellos cinco permanecen en UCI (sin cambios) y 75 en otras unidades (+2). El total de infectados baja a 1.247.
La tercera área en la que crece la presión hospitalaria es la de Lugo, con 63 pacientes ingresados de 1.148 casos activos: cuatro en UCI (sin cambios) y 59 (+5) en planta.
En distinta situación se hallan A Coruña, Ourense, Santiago y Ferrol. El área centralizada en la capital de As Burgas contabiliza 1.021 casos activos y sale del máximo nivel de alerta del Sergas tras una semana de descenso. También bajan a 15 (-4) los pacientes en UCI, mientras que los internos en otras unidades se mantienen en 88 (sin cambios).
El área de A Coruña y Cee notifica un alza en sus casos activos, que ya son 1.898. De ellos, 26 se encuentran en UCI (+3) y 128 (-6) en planta.
También Santiago baja su presión hospitalaria con 46 pacientes en planta (-3) y 16 en unidad de críticos (sin cambios), mientras que los infectados caen a 1.170.
Por último, Ferrol registra un descenso por la mínima: de los 1.013 enfermos con el virus, 45 necesitan internamiento (-1) y 9 en la UCI (sin cambios).
