En apenas tres semanas Galicia duplica el número de contagiados por Covid-19 y supera los 10.000 casos activos, con un total de 10.196 contagios. En las últimas veinticuatro horas se registraron 687 nuevos infectados y siete personas diagnosticadas de Covid-19 fallecieron. Se trata de una mujer de 82 años ingresada en el Hospital de Ferrol, un hombre de 76 en el Hospital de Ourense que procedía de la residencia de tercera edad de Barbadás, un varón de 82 años en CHOP de Pontevedra, otro de 80 en el CHUVI de Vigo, Una mujer de 88 en el CHUS de Santiago, una anciana de 86 anos en el Hospital de Lugo y otra de 85 en la residencia Nosa Sra. dos Miragres de Barbadás. Todos ellos tenían patologías previas, según el Sergas

También siguen al alza el número de pacientes hospitalizados en la comunidad, pues en las últimas veinticuatro horas subieron hasta los 693, de los que 85 personas están ingresadas en UCI. Otros 9.603 infectados permanecen en sus domicilios bajo seguimiento médico. El número de PCR realizadas, según los datos facilitados por la Consellería de Sanidade asciende a 730.777.

Por áreas sanitarias, Vigo sigue en cabeza en cuanto al número de casos activos, con 2.475 infectados; seguido por A Coruña con 1.831, Santiago con 1.338, Ourense 1.131, Pontevedra 1.119, Lugo 1.109 y Ferrol con 1.118. En cuanto a las residencias de la tercera edad, en las últimas veinticuatro horas se registraron otros 19 nuevos contagios, 9 de ellos son trabajadores del centro Ballesol de Vigo y recibieron el alta 26 pacientes. En total, se encuentran contagiados 456 usuarios de estos centros de mayores y 383 trabajadores.

En la comunidad educativa hay 1.272 personas infectadas, entre alumnos y profesionales. Además, 68 aulas han tenido que ser clausuradas y un colegio cerrado a consecuencia de la pandemia.

El especialista en Medicina Intensiva del Complexo Hospitalario Universitario de Santiago y miembro del comité clínico de Galicia, Pedro Rascado, defiende el cierre perimetral de 60 municipios gallegos desde la medianoche de este sábado y apela a “reducir los contactos interpersonales” y a cumplir con las medidas, como el uso de la mascarilla y guardar la distancia social, para reducir los contagios. “No hay otra manera que reducir los contactos interpersonales y mantener siempre la distancia y llevar mascarilla”, explicó en declaraciones a Europa Press.

Así, ha comentado que el número de casos de Covid en Galicia sigue en aumento porque “no está controlada de manera adecuada la transmisión” del virus fuera de los hospitales: “Si incrementa el número de casos eso se va transmitir a las camas hospitalarias y UCI”.

Por ello, este médico intensivista ha defendido las restricciones adoptadas en Galicia, “para salvar vidas” y porque el aumento del número de casos puede traducirse en más hospitalizaciones y “dentro de unas semanas” en una mayor ocupación de las UCI.

Tras puntualizar que en la actualidad la ocupación de las unidades de críticos en Galicia “no es problema” ha manifestado que “va a empeorar si se producen contagios fuera de hospitales” porque un porcentaje de los enfermos “acaba en UCI”. “A veces con estancias muy prolongadas”, apostilló.

En relación a la petición de algunas comunidades autónomas del confinamiento domiciliario y su posible aplicación en Galicia, el doctor Rascado defiende las medidas adoptadas por el comité clínico esta semana en la Comunidad gallega para que bajen los contagios.

Los médicos de Primaria no pedirán PCR a los contactos de infectados

Los médicos de Atención Primaria ya no pedirán pruebas PCR a los contactos de los infectados por Covid, aunque acudan a su consulta y así se lo pidan. Tampoco harán a partir de ahora el seguimiento telefónico diario de este contacto que está en cuarentena a la espera de confirmar si está contagiada. Así se lo ha ordenado por correo electrónico la Consellería de Sanidade. El departamento que dirige Julio García Comesaña justifica la decisión para “suprimirles tareas burocráticas y que puedan dedicar ese tiempo a la prestación asistencial”. También argumenta que se “evitan duplicidades e interferencias” con la Central de Seguimientos de Contactos (CSC), que es la que se encarga de rastrear a los posibles infectados y hacer seguimiento de los contagiados. Sin embargo, esta decisión no convence a los médicos. La presidenta de la Asociación Galega de Medicina Familiar e Comunitaria, (Agamfec), Susana Aldecoa, lamenta que, desde el inicio de la pandemia, “hay mucha oscuridad con respecto al tema de la Central de Seguimiento de Contactos, sobre quiénes son los rastreadores y sobre quién realiza cada labor”. “La coordinación con ese centro es inexistente, no sabemos cómo realizan su trabajo y esto es algo que nos inquieta mucho. Tendría que haber una base de datos compartida, donde unos y otros pudiésemos comprobar que no hay fugas de información ni contactos no estudiados o seguidos. Esto evitaría también duplicar esfuerzos llamando dos y hasta tres veces, a la misma persona. Algo que está sucediendo y que hay que pulir inmediatamente”, advierte la doctora Aldecoa, e insiste: “Si no hay una mapa, nosotros no podemos saber cuando tenemos un caso qué se está haciendo. Deberíamos poder saberlo a través de Telea, que es una parte de la historia electrónica a la que se supone que pueden acceder los rastreadores. Ellos tendrían que incluir ahí la lista de contactos que el paciente les da cuando se le llama, y nosotros podríamos consultar ese listado. Pero la realidad es que ahí no figura nada. Prácticamente todas las historias están en blanco”, señala. En el área sanitaria de Vigo, que es donde ejerce la doctora Aldecoa, la instrucción de Sanidade les fue comunicada el viernes pasado, mediante videoconferencia. “La dirección de Atención Primaria citó a los referentes Covid de cada servicio y nos pidió que trasladásemos a nuestros compañeros que el estudio de los contactos los tiene que realizar la CSC, y que nosotros nos limitemos a los casos. Le hicimos saber, de nuevo, que se estábamos detectando fallos en el seguimiento de los contactos, y nos dijeron que se iba a mejorar”, apunta la presidenta de Agamfec, quien asegura que “algunos compañeros se han declarado ya ‘insumisos’” a esa orden. “Estamos ante un problema de salud pública que trasciende a este tipo de absurdos. Si tenemos conocimiento de un contacto no estudiado que lleva esperando cuatro días en su casa sin que nadie lo llame, le pediremos la PCR y ya está. Es una cuestión de responsabilidad”, subraya, e incide: “El estudio de los contactos de los positivos es crucial. Los pofesionales de Agamfec lo llevamos diciendo desde marzo. Incluso elaboramos un documento en el que apuntábamos cuántos rastreadores harían falta. Se lo pasamos a la Consellería, pero no hizo nada con él. Insistimos en que había que preparar todo esto de forma minuciosa de cara a la segunda ola, pero ha sido una improvisación constante”, lamenta. El integrante del Comité Clínico de la Xunta para la gestión de la pandemia y presidente de la Sociedad Española de Urgencias y Emergencias (Semes), Manuel José Vázquez Lima, reconocía ayer que el sistema de rastreo de contagiados de Covid-19 y sus contactos de Galicia sufre todavía agujeros en su gestión: “No le voy a mentir: estoy convencido de que es mejorable y que en algunos momentos existen errores de coordinación”. El también coordinador de Urgencias del Hospital de O Salnés intervino ayer en la comisión parlamentaria para la reactivación eonómica y social tras la pandemia, que se centró en el aspecto asistencial y científico de la lucha contra el coronavirus.