El béisbol coge impulso en Pontevedra

Los Guerreros de Pontevedra, un club recién formado con esencia venezolana, se suma a los Relámpagos para hacer crecer esta disciplina deportiva en la ciudad con dos equipos

Foto de equipo de los Guerreros de Pontevedra, de reciente creación.

Foto de equipo de los Guerreros de Pontevedra, de reciente creación. / FdV

Antonio Santos

La tradición deportiva de Pontevedra, tanto a la hora de ser ciudad natal de grandes atletas y jugadores como de acoger eventos nacionales e internacionales, es una de las más significativas del panorama nacional. No obstante, la ciudad del Lérez también quiere apuntarse a la moda de los deportes emergentes, y entre ellos está el béisbol.

Originario de los Estados Unidos, donde es una de las disciplinas más arraigadas, son ya varios los equipos pontevedreses que se han animado a probar este deporte y, especialmente, su modalidad hermana, el sófbol, en el que el campo es más corto y la pelota de juego es más grande y blanda.

Al primer paso dado por los Relámpagos, club fundado en 2021 y que ya cuenta con una veintena de jugadores y jugadoras federadas, se sumaron recientemente los Guerreros de Pontevedra, un equipo con raíces en un país en el que el béisbol es religión: Venezuela.

“Al ser todos venezolanos, nuestro deporte nacional es el béisbol, como aquí el fútbol. Todos crecimos prácticamente jugándolo. Nos unimos varios venezolanos, en inicio cinco, para idear cómo armar el equipo. Fuimos convocando gente y ya somos 25 jugadores. Primero nos convocó una asociación de venezolanos que hay en Pontevedra, pero no se concretó nada con ellos y estuvimos llamando a gente aparte para armar el primer equipo”, explicó el presidente de la entidad, Armando Rojas.

Ambos equipos se midieron varias veces, con triunfos para los dos bandos

Con el club ya conformado, los Relámpagos y los Guerreros jugaron la pasada semana el primer derbi local en la historia de este deporte, como parte de un torneo triangular de sófbol. Aunque el resultado estuvo reñido, con victoria por 13 a 12 para los Guerreros, lo más importante del encuentro fue el buen ambiente entre jugadores y el disfrute por el deporte, certificado tras el partido con una foto de familia entre ambos conjuntos.

El hecho de que haya dos equipos de béisbol y sófbol en Pontevedra es buen síntoma de la salud de la que goza este deporte en Galicia, donde el equipo con más solera, el CBS Cambre, inició sus operaciones en los años 90. Así lo asegura el presidente de los Relámpagos, Andrés Taboada, que señala que desde la fundación del club pontevedrés, el mundillo de los partidos amistosos, los torneos y las competiciones por toda la geografía gallega sigue yendo en aumento.

“El año pasado quedamos segundos en la liga gallega de sófbol mixto y este año volvemos a jugarla. Tenemos este fin de semana un torneo en Lalín, un triangular organizado por el Concello. En la Copa gallega vamos a tener incluso más equipos que en la liga. La cosa va creciendo bien”, desveló Taboada, que ya conocía a algunos de los Guerreros porque acudieron a ver varias sesiones de entrenamiento de los Relámpagos antes de organizarse.

La directiva de los Guerreros tiene claro por dónde iría el hipotético camino de este club recién nacido. “Nos gustaría abrir una escuela de formación y abrir una cantera para dar a conocer el deporte a los más pequeños. La idea es ayudar al crecimiento y proyección de este deporte en Galicia”, adelantó Rojas, que espera poder incluir próximamente a su equipo en la competición en la que participan los Relámpagos, la Liga Galega de Sófbol Mixto, sancionada por la Federación Galega de Béisbol e Sófbol.

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Tanto los Relámpagos, que juegan algunos de sus partidos en Bora, como los Guerreros, que usan el abandonado campo de fútbol Raimundo Piñeiro de Lérez, tienen claro que para poder expandir todavía más en la ciudad el deporte que siguen fervientemente es necesario disponer de mejores instalaciones que las actuales. Principalmente, contar con un campo adecentado en el entorno de la ciudad para poder albergar partidos y torneos como conjunto local. “Eso es lo que más necesitamos. Tener aquí una instalación propia para poder practicar el deporte y acoger equipos. Estamos pendientes de ir a Lisboa, porque nos invitó la Federación Portuguesa a jugar allí, pero no tenemos cómo devolverles el favor. Ellos estarían encantados por venir pero tenemos pendiente esa invitación”, explicó Taboada.

Para los Guerreros, la posibilidad de contar con instalaciones acondicionadas sería clave para desarrollar uno de sus principales objetivos a largo plazo: habilitar una escuela de formación para generaciones futuras.

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