Enfermería repite por tercer año en el podio de los centros mejor valorados de la UVigo

La Escuela de Enfermería del Campus de Ourense se cuela por tercer año consecutivo en el podio de los centros más valorados de la UVigo. Así lo ha querido el alumnado a través de las encuestas de satisfacción. En el último sondeo, correspondiente con el curso 2022/2023, los estudiantes otorgaron un 4,23 sobre 5 a la formación ourensana, la segunda nota más alta de los tres campus, solo por detrás de la Facultad de Dirección y Gestión Pública de Pontevedra.

Pero la escuela ya se había convertido en el segundo centro más valorado de la institución el curso anterior (2021/2022), con un 4,33, mejorando así los resultados del año previo, cuando logró el tercer puesto con un 3,25. Los resultados de las encuestas de satisfacción, de hecho, no han dejado de mejorar desde 2017. Si entonces los estudiantes le otorgaban un 2,69, en siete años la nota ha aumentado en casi dos puntos.

Los motivos

La directora de la Escuela de Enfermería, Milagros Fernández, reivindica la implicación y esfuerzo del personal del centro como principales razones de la buena valoración de los alumnos. “Somos una escuela pequeña, con pocos medios, muchos menos que una facultad, así que estamos muy contentas de este resultado. Nuestro trabajo nos lleva”, apunta. Fernández asegura que Enfermería no es un grado sencillo, ya que desde el segundo curso los estudiantes compaginan la formación teórica con la práctica. “Las prácticas son constantes desde segundo hasta que terminan la formación, y es algo duro, exige gran presencialidad”, recalca. El equipo directivo se ha encargado de ampliar el número de servicios por el que rotan los futuros enfermeros, lo que les permite conocer las diversas áreas en las que podrán trabajar. “Van al hospital, a los centros de salud, al 061, a los centros sociosanitarios, rotan también por la gestión de Enfermería...”, explica la directora.

Al margen de aumentar la oferta de prácticas, el equipo de la Escuela se preocupa de preparar al estudiantado para su llegada a consulta. “Organizamos una semana de actividades complementarias en las que se le enseña sobre seguridad del paciente, sobre farmacia y laboratorio... La idea es que lleguen con unas nociones generales a las prácticas para ponerlos en situación de lo que se van a encontrar”, comenta. El año pasado, el centro también puso en marcha un proyecto de recorridos interactivos por el hospital, una forma de que los alumnos se pongan en los zapatos de los enfermos: “La actividad consiste en ir de un servicio a otro del hospital, va un grupo de estudiantes acompañado de un profesional, pero tienen que guiarse ellos mismos. Es una forma de que empaticen con el enfermo que llega y no sabe dónde está”.

La directora habla de la importancia de completar la teoría con experiencias formativas: “Ahora mismo, con internet, todo el mundo tiene acceso a la teoría. Por eso es necesario enriquecer las clases y ayudarlos a que participen y conozcan todo lo que les interese, sean ciclos de cine, conferencias, jornadas profesionales...”.

Apoyo unánime de las instituciones

Desde que el pasado octubre la UVigo anunció la creación de una única Facultad de Enfermería en Pontevedra, las instituciones y entidades sociales (el Colegio de Médicos, el Colegio de Arquitectos, el de Farmacéuticos o el de Economistas) se volcaron con la Escuela. Aunque desde la UVigo aseguran que habrá equidad entre las tres sedes (Pontevedra, Ourense y Vigo), el anunció levantó preocupación en la provincia.

En esa línea, el pleno del Concello de Ourense aprobó por unanimidad en noviembre una moción para promover la construcción de una facultad propia en la ciudad. Por su parte, desde la plataforma ProCampus se enviaron varias cartas al rector en las que se ponía de manifiesto el importante papel de la Escuel. El colectivo también pidió a la Xunta impulsar “de oficio” una facultad en la ciudad.

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