El Concello examina a 10 personas para trabajar como taxistas

El sector, con 11 licencias en la villa, se mantiene con el colchón de los viajes sanitarios de las Mutuas y de la movida

Parada de taxis de la calle Montero Ríos, junto a la estación marítima, en Cangas. |   // FDV

Parada de taxis de la calle Montero Ríos, junto a la estación marítima, en Cangas. | // FDV

Con 11 licencias, el sector del taxi en Cangas sigue sobreviviendo frente a la amenaza de los Vehículos con Transporte con Conductor, los llamados VTC, que gestionan empresas como Uber, Cobify o Bolt que han arrasado el mercado del taxi en las grandes ciudades y aquí tienen una tímida presencia. Prueba de que el sector sigue generando empleo en Cangas es el examen para obtener el permiso municipal de conductor de taxi que hoy se celebra en el salón de plenos del Concello, en una convocatoria a la que se han presentado 14 personas, de las que 4 han quedado excluidas al no reunir los requisitos.

Entre quienes optan al permiso de conductor de taxi habrá quien haya comprado alguna licencia de taxi y necesite la pertinente autorización municipal o vayan a trabajar como empleados de los autónomos que ya tienen la licencia en una fórmula que cada vez se extiende más. Fuentes consultadas aseguran que sí hay autónomos que están buscando empleados para llevar también el taxi sin dejarlo el titular, con el fin de aumentar el servicio.

En Cangas siguen existiendo dos paradas de taxi, la principal que está en Montero Ríos, junto a la estación marítima; y la ubicada en Méndez Núñez, más volcada en los viajes nocturnos para dar servicio a la “movida” de la avenida de Marín.

Los viajes de noche de los fines de semana siguen siendo un “colchón” económico para el sector del taxi en Cangas como también lo son ls servicios sanitarios de las Mutuas y los seguros privados que generan desplazamientos a Vigo. Las playas podrían formar parte de ese colchón en verano, aunque los viajes, en este caso son más contados, porque un desplazamiento, por ejemplo, a Nerga o a Barra, pueden suponer 12 euros o 25 si es con vuelta, una cantidad que no todos los bolsillos se la pueden permitir, aunque se vaya en el vehículo con más plazas que tiene el sector, de 6 y 8 plazas incluyendo este último para discapacitados.

"No se puede ir en pantalón corto"

Fuentes del sector aseguran que nunca se llegaron acuerdos de transporte conjunto con las navieras del transporte de ría para dar servicio a las playas, lo que evidencia la desunión que existe en el sector que sigue afrontando el futuro sin cambios en el horizonte, aunque con la preocupación de que cada vez se vele menos por el decoro en la profesión. Las mismas fuentes del sector en la provincia aseguran que no puede ser que un taxista acuda al trabajo en pantalones cortos y el vehículo sin limpiar: “Hay que cuidar la imagen de cara al cliente, sobre todo en las Rías Baixas, y ofrecer confianza a las familias de que sus hijos van seguros cuando se les lleva por las noches de regreso a casa”.

Conocimiento del Concello, vías o centros sanitarios

El examen de conductor de taxi se realiza de acuerdo a unas bases reguladoras aprobadas por el Concello, visto el interés creciente para obtener el permiso de auto-taxi y también de contratación de personal asalariado. El examen certifica la capacitación de aptitud profesional de la persona para ejercer la profesión con vehículos adscritos a títulos habilitantes correspondientes a dicho municipio, sin perjuicio de la posibilidad de salir del municipio para prestar servicios interurbanos. La prueba, de 30 minutos, consiste en un ejercicio con 20 preguntas tipo test, con tres respuestas alternativas, y una sola correcta. Las respuestas erróneas restan 0,33 puntos. Tres funcionarios del Concello forman el tribunal encargado de realizar y calificar el examen. ¿Y a qué se enfrentan los aspirantes? Tienen que demostrar conocimientos sobre el término municipal y sus alrededores, sus vías públicas y la red de carreteras de la comunidad autónoma, los lugares de interés turístico, oficinas públicas, centros sanitarios, dependencias oficiales y hoteles principales, así como los accesos e itinerarios más directos para llegar a cualquier punto del término municipal. También tienen que conocer la Ley de Seguridad Vial, de transporte público de personas en vehículos de turismo de Galicia; normas relativas al servicio, régimen y aplicación de las tarifas vigentes (la bajada de bandera en Cangas está 3,75 euros y el taxímetro empieza a funcionar en 1,5 kilómetros, con un incremento del 20% (4.50 euros) de 22:00 a 06 horas y en festivos) y también deben tener conocimientos básicos en primeros auxilios.

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