Remata la reparación del paseo de Massó y el Concello cambiará la tubería del agua

La Autoridad Portuaria de Vigo ha dado por concluidas las obras de reparación del tramo del paseo de O Salgueirón afectado por la borrasca Karlotta, aunque el Concello de Cangas desconoce oficialmente que se hayan ejecutado porque “ninguén nolo comunicou”, aseguran la alcaldesa, Araceli Gestido, y el concejal de Urbanismo e Medio Ambiente, Antón Iglesias. Pero la empresa C.C.G. (Construcciones, Cubiertas y Gestión S.L.), que realizó los trabajos por encargo del Puerto, titular de los terrenos, ya no tiene operarios en la zona y retiró los precintos y el cartel colocado frente a la antigua fábrica de Massó, por lo que el Ejecutivo local entiende que han rematado.

A principios de febrero, el temporal arrancó y arrastró parte de la balaustrada, además de piedras, trozos de hormigón y planchas metálicas, que quedaron esparcidas por el entorno, con los correspondientes “problemas de seguridad”, que el Gobierno local denunció y urgió a “valorar los desperfectos y reponer ese espacio a su estado original lo antes posible”. La Autoridad Portuaria aplazó la actuación hasta la llegada del buen tiempo y en la segunda semana de abril comenzaron los trabajos con un plazo de ejecución “de un mes, aproximadamente”, según comunicaron los promotores, aunque se ejecutó en la mitad de tiempo.

En la línea de costa frente a la antigua factoría conservera es visible la reforma tras los desperfectos causados por Karlotta, que partió por la base varios postes de hierro que sostenían la balaustrada de tubos de acero inoxidable y arrancó grandes trozos del solado de hormigón, además de arrastrar grandes piedras que formaban parte del dique de contención y arbustos y plantas que crecen al borde del mar. También resultaron afectadas varias farolas y el cableado que les da suministro eléctrico y que supuestamente han quedado repuestos, ya que la Autoridad Portuaria “non concretou que ía facer nin se xa está feito”, advierten.

Avería en el abastecimiento

Lo que no se ha reparado es la tubería de agua que abastece a toda la zona, dañada y que sufre una importante fuga, por lo que el Concello ha cerrado la llave del suministro. Antón Iglesias asegura que sería más costoso levantar el hormigón y repararla que habilitar una nueva tubería por la zona de tierra, y opta por esta segunda opción, aunque la solución aún podría tardar “semanas”.

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