Fiestas de San Martiño | Historia acerca del templo del patrón de Bueu

San Martiño de Bueu, mucho más que una iglesia

El municipio arrancó las fiestas patronales con una conferencia a cargo del investigador local Manuel Aldao

Manuel Aldao (a la izq.), ayer en la iglesia de Bueu junto al profesor Salvador Castro. A sus espaldas el impresionante retablo de San Martiño, de estilo barroco y de finales del siglo XIX.

Manuel Aldao (a la izq.), ayer en la iglesia de Bueu junto al profesor Salvador Castro. A sus espaldas el impresionante retablo de San Martiño, de estilo barroco y de finales del siglo XIX. / Gonzalo Núñez

La actual iglesia de San Martiño de Bueu data de la segunda mitad del siglo XIX, después de que el anterior templo, que con toda probabilidad era de estilo románico, fuese declarado en ruina ante el riesgo derrumbe. La historia de aquel primer lugar de culto, del actual y de todo su entorno fue objeto ayer de una detallada conferencia del vecino de Bueu e investigador Manuel Aldao, que sirvió como apertura de las fiestas patronales. “La iglesia, especialmente la parroquial, es mucho más que una edificación de un determinado estilo arquitectónico”, defendió en la apertura de su charla. Más allá de un símbolo de creencias y religiosidad es también un punto de reunión y encuentro con la comunidad. “Ahí celebramos las nuevas vidas, despedimos a los que se van, proclamamos comunitariamente el amor y ahí los niños del entorno tenían un parque de juegos”, recuerda Aldao.

Una copia del documento de 1227 en el que aparece citada la parroquia de Bueu.

Una copia del documento de 1227 en el que aparece citada la parroquia de Bueu. / Archivo Manuel Aldao

La primera mención al topónimo de Bueu data del año 938, en un documento de una donación al monasterio de Celanova y la primera referencia que se conserva a la parroquia bueuesa está fechada en 1227. La documentación conservada permite intuir que la iglesia original era un templo románico, que estaba orientado en un sentido inverso al actual –en la tradicional disposición románica de este a oeste– y que era una edificación de una sola nave. El pleno municipal del 28 de marzo de 1861, con Ramón Pla de alcalde, acuerda su declaración de ruina.

La fachada de la actual iglesia de San Martiño de Bueu.

La fachada de la actual iglesia de San Martiño de Bueu. / Archivo Manuel Aldao

El proyecto de la nueva iglesia se elaboró ya en 1858 y contaba con un presupuesto de 183.072 reales, tal como explica Manuel Aldao. Ese renovado templo de estilo neoclásico empezó a recibir a los fieles a partir de 1865 y obligó a algunos cambios. Entre los más importantes la renovación de las imágenes: el tamaño de las originales estaba en proporción a la iglesia románica, de dimensiones más pequeñas. Así, se procedió a encargar nuevas tallas y que se acercaban a una escala natural.Manuel Aldao destaca un triste suceso en esos primeros años de la nueva iglesia: un robo. “En la noche del 7 al 8 de diciembre de 1886 los ladrones entraron por un agujero practicado en la puerta del lateral norte. Se llevaron todos los objetos de plata y de otros metales plateados”, cuenta el investigador.

Se salvó una cruz parroquial de 95 onzas, que había costado más de 1.714 reales y que fue encargada en 1860 por el párroco Joaquín González.Una salvación que se debe a que, probablemente por su alto valor, no se guardaba en el templo. Para reponer el material robado se organizaron colectas y algunas de las personas con más recursos de la época donaron directamente algunos de los elementos a reponer.

Una imagen del altar y del retablo de la iglesia de San Martiño de Bueu.

Una imagen del altar y del retablo de la iglesia de San Martiño de Bueu. / Archivo Manuel Aldao

Uno de los hitos es la construcción del espectacular retablo y altar de la capilla mayor, un encargo realizado por el párroco Cándido Alvarellos en 1891 al maestro José Cerviño García. Esta imponente pieza de estilo gótico incorpora un baldaquino y acoge las imágenes de San Martiño, la Virgen del Pilar y un Eccehomo.

Poco más de un siglo después de su inauguración fue necesario acometer una profunda renovación del templo parroquial. Manuel Aldao cuenta que en 1974 se sustituyó la armazón de la cubierta, que estaba fabricada en madera y se construye una de hormigón rígido, y se cambia el techo de las naves, que también era de madera, por hormigón armado. La intervención sirvió para que el templo ofrezca un aspecto mucho más despejado porque se retiraron los encofrados revestidos de argamasa o el encalado de los muros, que quedaron con la piedra a la vista.

Una vista del interior de la iglesia de San Martiño de Bueu.

Una vista del interior de la iglesia de San Martiño de Bueu. / Archivo Manuel Aldao

La documentación aportada ayer durante la conferencia de Manuel Aldao incluyó algunas curiosidades, como una nota al margen en el libro de bautizos que dice: “Esta Parroquia desde hoy es Villa por Cédula Real”. Ese hoy era un 12 de julio de 1850, hace ya 173 años.

La Cédula Real del 12 de julio de 1854 por la que Bueu recibe el título de Villa.

La Cédula Real del 12 de julio de 1854 por la que Bueu recibe el título de Villa. / Archivo Histórico Diocesano

La conferencia del investigador bueués no se limitó solo a la iglesia parroquial, sino que realizó un recorrido histórico por otros elementos vinculados al templo, como el antiguo cementerio y su reciente reconversión en un parque público; la conocida como Fonte do Cura; el vía crucis que ordenó construir en 1681 Fernando de la Rúa Freire o la casa rectoral, que tuvo que ser sometida a una restauración integral en el año 1975 debido a su estado ruinoso. Una obra que se financió con la venta de unos terrenos que hoy acogen el centro de infantil de A Pedra.

También a modo de curiosidad, Manuel Aldao se refirió a la primera persona que fue enterrada en el antiguo cementerio municipal, un joven de solo 15 años llamado Francisco Bares. Era hijo del ilustre maestro de Bueu Manuel Bares. Y la última persona en recibir allí sepultura fue una vecina de Meiro, María Juncal Vilas, un 9 de enero de 1964. Hace ya casi 60 años.

Una imagen del conjunto que forma el calvario del atrio de la iglesia de Bueu.

Una imagen del conjunto que forma el calvario del atrio de la iglesia de Bueu. / Archivo Manuel Aldao

El calvario más antiguo de Galicia

Uno de los elementos más llamativos del atrio parroquial de Bueu es su calvario: los tres cruceiros que representan la crucifixión de Cristo y de los ladrones Dimas y Gestas en el Gólgota. Solo hay tres conjuntos de estas características en Galicia: Beade (Ourense), Castro Barbudo (Ponte Caldelas) y el de Bueu, al que se refería Castelao en su libro “As cruces de pedra na Galiza” (publicado de manera póstuma en Buenos Aires en 1950).

El bueués es el más antiguo y el que tuvo quizás un recorrido más tortuoso. Literalmente un calvario. Los orígenes se remontan a la primera capilla de Santos Reis, que mandó edificar Fernando de la Rúa en 1686. Con el abandono y expolio de este primer templo ese conjunto se dispersó: el cruceiro central con Jesús se trasladó al entonces nuevo cementerio construido al lado de la iglesia (en la década de 1860), mientras que los de los ladrones quedaron depositados en una finca de Bueu.

En la década de 1920 José María Massó negoció la compra de los cruceiros de los ladrones para erigir un calvario en la finca familiar. Con la clasura del antiguo cementerio de Bueu, en 1983, se plantea la conveniencia de reunir el conjunto original. Primero se colocó en 1986, no sin vicisitudes, el cruceiro que estaba en el cementerio municipal, y se prepararon las bases para colocar algún día las tallas de los ladrones Dimas y Gestas.

En 1999 la familia Massó donó esas dos piezas y se se colocaron en su actual ubicación en enero de 2000. Tras más de un siglo separados Jesucristo, Dimas y Gestas volvían a encontrarse.

Los cruceiros que forman el conjunto del calvario situado en el atrio de la iglesia de Bueu, con el antiguo cementerio, ahora un parque público, al fondo.

Los cruceiros que forman el conjunto del calvario situado en el atrio de la iglesia de Bueu, con el antiguo cementerio, ahora un parque público, al fondo. / Fdv

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Las fiestas de San Martiño de Bueu afrontan hoy su jornada central, con el día propio del patrón del municipio. A partir de las 11.00 horas habrá animación por la calle con la charanga Noroeste. A las 12.00 horas será la misa solemne en el templo parroquial, cantada por la Coral Polifónica Marusía y seguida de procesión. Estará también la exposición de fotografías antiguas de la Asociación Santos Reis: si el tiempo lo permite será en el atrio pequeño y en caso de lluvia en los bajos de la rectoral.

Por la tarde en la carpa habrá juegos para los más pequeños y a las 17.00 horas comenzará la XXVI Carreira Popular de San Martiño, con casi 700 inscritos entre todas las categorías. La prueba deportiva implicará restricciones en el tráfico: desde las 14.00 horas estará prohibido estacionar en toda la Avenida Montero Ríos y la circulación quedará interrumpida a partir de las 15.30 horas y hasta que finalice la carrera absoluta. Las carreras para las categorías escolares comenzarán a las 17.00 horas y la absoluta tomará la salida a las 19.00 horas, con un recorrido de 6 kilómetros.

A las 20.00 horas en el Centro Social do Mar se representará la obra de teatro “#2Pilgrims”, de Redrum Teatro y con entrada gratuita. La fiesta en la carpa de As Lagoas comenzará a partir de las 21.00 horas. En primer lugar habrá una verbena con la orquesta Triunfo y a la que seguira el Dj Santymix.

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