La temporada de caza arranca con pocas piezas abatidas por culpa de la lluvia

La temporada de caza menor arrancó ayer en la comarca de O Morrazo con mucha lluvia y pocas piezas abatidas. Un inicio pasado por agua, tal como reconocían algunos de los cazadores que salieron al monte en la apertura de la campaña. Es un balance similar al que realizan en otros cotos de caza como en Pontevedra o Arousa.

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Algunos de los cazadores atribuyen este mal inicio de la temporada tanto a la meteorología como a la escasez de piezas. Con la lluvia de ayer muchos decidieron quedarse en casa o enfundar la escopeta de manera anticipada. Entre los lugares en los que se notaba la presencia de cazadores destacaba el entorno de Donón, los montes de Ermelo, Cruz da Maceira y San Lourenzo, entre otras zonas.

La temporada de caza menor permite capturar especies como conejo, perdiz o faisán y estará abierta hasta el próximo 6 de enero. La campaña de caza mayor arrancó ya a principios de septiembre y en este caso las piezas son más abundantes, sobre todo por la sobrepoblación de jabalí. Este mismo fin de semana varios cazadores de O Morrazo se desplazaron a la zona de Beade, en Vigo, para participar en una batida en la que se capturaron hasta quince jabalíes. El entorno de la comarca de Vigo es precisamente uno de los lugares en los que la Dirección Xeral de Patrimonio Natural, que depende de la Consellería de Medio Ambiente, decretó la emergencia cinegética por la elevada presencia de esta especie.

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