La Cuba más dura a través de un objetivo

El prestigioso fotógrafo y fotoperiodista Delmi Álvarez (Vigo, 1958) se asienta en Moaña después de una etapa de 12 años residiendo en Bruselas. Además, aprovechando que está en la villa, mañana, viernes 28 de julio, presentará en el local de la Asociación de Mulleres de Moaña su proyecto documental “Cuba 1991”, con fotografías en blanco y negro que realizó durante su larga estancia en esta isla del Caribe en pleno “periodo especial”, como el régimen le llama a la larga crisis económica que comenzó como resultado del colapso de la Unión Soviética.

La presentación del libro es a las 20.00 horas y además del propio autor intervendrá la diputada en el Parlamento europeo por el BNG, Ana Miranda, y el representante de la ‘Asociación de amizade galego cubana Francisco Villamil’, Xosé M. Crego.

Delmi Álvarez explica cómo a través del colectivo de amistad con Cuba logró un visado y finalmente obtuvo el “permiso de residencia permanente” que le facilitó moverse por toda la isla de Cuba sin las restricciones a los periodistas extranjeros que existían en pleno periodo de hambre y desabastecimiento. Recuerda que el proyecto nació “porque en 1989/90 hice el proyecto sobre gallegos de la diáspora y pasé por Cuba. Allí descubrí una comunidad gallega importante y me propuse este proyecto en los años del hambre en el país”.

Recorrió casi toda la isla pese a las dificultades para moverse “ante la falta de combustible”. En el libro los lectores se encontrarán un contexto sobre la Cuba de los 90 así como imágenes de distintos aspectos de la vida de los cubanos, como el trabajo en las minas, en la agricultura recogiendo caña de azúcar o algunos de los usuarios del Centro Gallego de La Habana. Incluso tiene documentada la visita de Manuel Fraga en septiembre del 91, entonces presidente de la Xunta de Galicia, a la isla para reunirse con Fidel Castro.

Actividades cotidianas y textos sobre las dificultades del desabastecimiento se mezclan en la obra. Delmi Álvarez explica que consiste en “un trabajo documental y humanista”, alejado de la ideología política. Destacan las sonrisas de muchos cubanos en una época tan dura y el autor recuerda con cariño que en aquel viaje “te ofrecían todo. Si solo tenían una cerveza en casa te la ofrecían”.

El paraíso

Delmi Álvarez, que ya es un nuevo vecino de Moaña, explica que “quiero vivir en O Morrazo porque para mí es el paraíso” y recuerda pasajes de su infancia en la parroquia de Domaio.

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