Cangas busca fincas cerca de la zona de playas para destinarlas a aparcamientos disuasorios

El Concello las acondicionaría y mantendría durante los meses de verano | El servicio de parking sería gratuito | Con esta medida el gobierno busca solucionar los problemas de la falta de estacionamiento en la costa

Acceso a la playa de Areacova.

Acceso a la playa de Areacova. / Santos Álvarez

Se acerca el verano y el gobierno local de Cangas quiere trabajar con tiempo en la zona de playas. No solo hay que resolver problemas de sentido de la circulación del tráfico, como se están intentando en O Hío, en colaboración con los vecinos; en una situación más que complicada. Ayer en la habitual reunión de gobierno de los lunes de lo que se habló es de encontrar solución a otro de los graves problemas con los que se enfrenta cada año el Concello, que es acabar con el caos que representa la falta aparcamiento en la zona de playas, a pesar de la ayuda imprescindible de los leiraparkings que muchos permanecen, pero que otros abren un año y nunca más. Desde que Trabajo metió mano en este tipo de aparcamientos, el número de ellos descendió, sobre todo en la zona de O Hío.

Lo que acordó el gobierno local es solicitar a las personas que tienen fincas próximas a las playas de O Hío y Aldán que las cedan al Concello de Cangas, que se ocupará de su desbroce y de su mantenimiento durante los tres meses de verano. Evidentemente, estos aparcamientos, a los que se les quiere dar la categoría de disuasorios, serán gratuitos. En la construcción de aparcamientos disuasorios se advierte un agravio comparativo respecto a Moaña por parte de la Xunta de Galicia, donde ya se construyó uno, en Broullón, se ha terminando la ampliación de otro en Domaio y hay en proyecto dos en la autovía de O Morrazo. Claro que la Xunta no tiene terreno en esta zona de playas. Es de particulares o está en manos de la Comunidad de Montes de O Morrazo. La población de Cangas, últimamente, se muestra muy sensible respecto a las inversiones de la Xunta en Moaña y se mira con sana envidia los aparcamientos disuasorios.

La alcaldesa de Cangas, Araceli Gestido (BNG) comenta la urgente necesidad de contar con estos aparcamientos disuasorios a principios de verano, consciente del problema que se avecina. Con ello se quiere evitar que se estacione en las propias vías, que son muy estrechas, y, sobre todo, que se haga impidiendo la entrada y salida de vehículos de las casas, algo que supone más de 60% de las multas que durante los fines de semana pone la Policía Local de Cangas a lo largo del verano, y que también implica hacer uso del servicio de grúa, con todo lo que ello supone. La intervención de la grúa también supone alteración en el tráfico. Así que el gobierno quiere soluciones fáciles para todos y los aparcamientos disuasorios lo son, ya que se obliga a que los vehículos queden a una distancia prudencial de las playas.

Otros gobiernos locales intentaron soluciones parecidas, sobre todo en la parroquia de O Hío, pero no tuvieron mucha fortuna en su propuesta. Apenas hubo ofertas, para la sorpresa de los gobernantes.

La Policía Local de Cangas, un fin de semana de agosto del año pasado, sancionó a 131 vehículos, la práctica totalidad por estar mal estacionados. En un momento, la Policía se vio obligada a cortar los accesos a la playa de Pinténs, en la parroquia de O Hío, a los que no eran residentes, por el constante flujo de tráfico de coches. El Camiño dos Carballos y el entorno de la playa de Castiñeiras se situaron como los principales puntos negros del verano pasado.

El hecho de ser un vial de doble sentido y que los coches estacionen de forma incorrecta a ambos lados de la carretera reduce prácticamente a un único carril el paso, provocando atascos cuanto se encuentran coches en sentidos opuestos. Y estamos hablando de una cifra que no suponía un récord de multas, que se había batido también ese mes de agosto con más de 200 vehículos sancionados con un importe de entre 80 euros las infracciones leves y 200 las graves.

El gobierno sabe que no se trata de una situación puntual, es consciente de que el problema va repetirse el próximo año si no se actúa rápido y parece que la única solución que se encuentra son estos aparcamientos disuasorios, que dependerán de si los propietarios de fincas las ponen en manos del Concello, para que las acondicione y realice su mantenimiento. Esa es, de momento, la única oferta que realiza el Concello a los propietarios.

Si el tripartito no encuentra una oferta suficiente para atender la demanda que se sabe tienen las playas de Cangas debe encontrar soluciones alternativas. Por eso se quiere saber cuanto antes de cuántas fincas puede disponer para establecer estos aparcamientos gratuitos. Aunque no hay ahora mismo muchas alternativas, por mucha severidad y contundencia con la que actúe la Policía Local no se va a resolver el problema.

El gobierno local de Cangas también tiene responder a las demandas de las asociaciones de vecinos que quieren que se les garantice que no hay vehículos que impidan la entrada y salida a sus casas.

Suscríbete para seguir leyendo