Negociaciones en Cataluña

Los Comuns abogan por un pacto con el PSC con la presidencia del Parlament para ERC

El portavoz parlamentario de la formación, David Cid, entiende que este acuerdo podría incluir una silla para su partido en la Mesa de la institución aunque tengan seis diputados

La líder de los Comuns en el Parlament, Jéssica Albiach.

La líder de los Comuns en el Parlament, Jéssica Albiach. / JORDI COTRINA

Sara González

Si hay un grupo que tiene clara qué alianza debe operar tanto en el Parlament como para garantizar la gobernabilidad en Cataluña es el de los Comuns. Siempre partidarios del tripartito de izquierdas en todas las instituciones, los de Jéssica Albiach han defendido sin ambages este jueves tejer un pacto con el PSC y con ERC, además de estar dispuestos a votar a favor de que los republicanos ocupen la presidencia de la Cámara. Así lo ha explicitado en una entrevista en Catalunya Ràdio el portavoz parlamentario de la formación, David Cid, que entiende que este acuerdo podría incluir una silla para su partido en la Mesa de la institución aunque tengan seis diputados.

Sin embargo, aunque esto último no fuera así y conscientes de que son en estos momentos el sexto grupo en representación, el dirigente ha precisado que "no bloquearán ningún escenario" si es para facilitar que haya una entente entre las tres formaciones que entiende que se tendría que hacer extensiva para que se pueda formar Govern. Los tres partidos suman 68 diputados, suficientes para garantizarse la presidencia de la institución, la vicepresidencia primera y dos sillas más.

Si se diera esa suma, Junts podría quedarse con la vicepresidencia segunda y una secretaría, mientras que la última de las siete sillas se la podría quedar el PP con un pacto con Vox. Por primera vez en prácticamente una década no habría mayoría independentista en la Mesa, aunque sí lo sería la presidencia si el PSC la cede a ERC a cambio de que después pueda facilitar la investidura de Salvador Illa.

Negociación discreta

Este sería un primer esquema que los Comuns verían lógico, aunque puede haber muchos pactos cruzados de distinta naturaleza, ya que a la hora de debatir sobre la Mesa también se negocian otras cuestiones, como la ubicación de los escaños de cada grupo en el hemiciclo, el reparto de despachos y presidencias de comisiones. Sea como sea, mientras dure la campaña de las europeas, las negociaciones transcurrirán con discreción hasta el día siguiente de las elecciones, el día 10, fecha en la que se tendrán que poner las cartas encima de la mesa y elegir la composición del órgano que gobierna el Parlament.

Será tras ese primer 'round' cuando empiece el segundo, el de la alianza para una posible investidura. Los Comuns ya matizaron este miércoles vía Jaume Asens, su candidato a las europeas, que el macrocasino del Hard Rock continuará estando entre sus condiciones para pactar con el PSC. Cid ha remachado este jueves que solo formarán parte de un Govern de Salvador Illa "donde se descarte" el proyecto.

La pista de aterrizaje del Hard Rock

La pista de aterrizaje, como explicó El Periódico, del mismo grupo editorial que este diario, sería recuperar la fiscalidad del juego que podría desincentivar a los inversores y frenar el proyecto, una cuestión que ya se exploró antes de que saltara por los aires el acuerdo de presupuestos y se precipitara el adelanto electoral. "Solo hay una mayoría factible para que no haya repetición electoral", ha defendido el dirigente, que no ve viable una suma de los socialistas con Junts ni tampoco deseable un PSC gobernando en minoría que juegue a la geometría variable a derecha e izquierda.