La Xunta “vigilará” la viabilidad industrial y preservación de empleos en Fandicosta

Tiene el 12,15% del accionariado a través de la sociedad Sodiga

Planta de Fandicosta en Domaio.

Planta de Fandicosta en Domaio. / Marta G. Brea

Lara Graña

Lara Graña

Una completa delegación de la Xunta mantuvo este martes una reunión con el comité de empresa de Fandicosta SA, en preconcurso de acreedores y en proceso de venta. El Ejecutivo gallego posee el 12,15% de la sociedad a través de la sociedad de capital riesgo Sodiga, tras una inversión de 3 millones de euros. En el encuentro participaron el secretario xeral de Industria, Nicolás Vázquez; la directora del Instituto Galego de Promoción Económica (Igape), Covadonga Toca; y la directora de Xesgalicia, Raquel Rodríguez Espiño. Los tres se comprometieron con el comité a “vigilar” la evolución del proceso, por el que en las próximas semanas se decidirá si la factoría de Moaña pasa a manos de la oferta liderada por Worldwide Fishing Company (Wofco) o la de Interatlantic Fish, como avanzó FARO.

“La Xunta actuará dentro de sus capacidad y velará por la selección de la oferta que tenga en cuenta un plan de viabilidad industrial y maximice la preservación de los puestos de trabajo”, indicó en un comunicado. Es el pool bancario, en todo caso, el que tendrá el mayor peso en la decisión final. La deuda financiera de la sociedad supera los 41 millones de euros; si se tiene en cuenta el pasivo de las filiales Casa Botas y Peixemar, también en preconcurso de acreedores, éste asciende a los 70 millones. Wofco ha planteado una quita inferior a la de Interatlantic, que por contra ha puesto sobre la mesa una mayor inyección de fondos. La banca pretende dejar despejado el traspaso antes de final de año.

La plantilla, conformada por más de 200 personas, quedará sometida durante más de seis meses a un expediente temporal de regulación de empleo. Hasta la fecha, Grupo Fandicosta se ha quedado sin su única filial en el extranjero (la argentina Pesquera Cruz del Sur, ahora en manos de la armadora Gandón) y sin sus instalaciones de Vilagarcía, vendidas por unos cuatro millones de euros a una compañía del sector.